Facebook y Google potencian sus sistemas de verificación de noticias

¿Cuánto daño hacen los bulos de internet? ¿Qué objetivos tienen las noticias deliberadamente falsas que se convierten en virales: políticos o puramente económicos? ¿Es la censura la solución? A estas y otras preguntas, trataba de contestar, o al menos de abrir el debate, el Foro Fake News: cómo combatir las noticias falsas en Europa, celebrado esta mañana en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. El evento está organizado por la oficina del Parlamento Europeo en España junto con la Alianza de Medios Líderes en Europa (LENA, por sus siglas en inglés). El País, medio del grupo PRISA como Cinco Días, pertenece a esta organización y colabora en su celebración. 

Ha sido su director, Antonio Caño, el encargado de abrir esta jornada con una primera verdad. «Las noticias falsas no son algo nuevo. Intoxicación y manipulación han habido toda la vida pero las fake news (y por eso, me resigno a denominarlas en inglés) son un producto distinto. Son una mentira diseñada como una verdad para ser consumida por un público sobresaturado de información, que busca solo refrendar sus puntos de vista, quedarse en la zona de confort de sus prejuicios». Y por eso, para Caño, «el periodismo riguroso es el único antídoto contra las noticias falsas».

Y de esto, saben mucho las plataformas de búsquedas y redes sociales, representadas en la jornada por Eero Korhonen, Strategic Partnerships Manager de EMEA Publishers de Google y Nick Wrenn, Head of Facebook’s News Partnerships team para EMEA Facebook. Para el representante de Google, «la culpa de las noticias falsas y su viralidad no es solo de las plataformas de distribución, es de la sociedad entera, del ecosistema». Es por eso que urge cada vez más la colaboración entre medios tradicionales y nuevos, más digitales, para que estos bulos desaparezcan.

«En Facebook, nos tomamos muy seriamente la desinformación», afirmó Wrenn. «Muchas de las noticias falsas son de caracter político porque es lo que se convierte en virales pero el objetivo es económico. Busca lucrarse con clics y nosotros hemos trabajado para que no lo logren, a través de cambios en el algoritmo que muestra las noticias a los usuarios. Hemos cerrado 30.000 cuentas falsas con noticias que buscan confundir», detalló.

Además, la red social tiene ya «programas de verificación de datos en cinco países europeos y pensamos extenderlos a otros países. Identificamos organizaciones de verificación de datos y trabajamos con ellas». «El año pasado, solo poníamos una señal de alerta pero no funcionaba. Ahora, esa página recibe una puntuación menor para que se distribuya menos en el algoritmo y así, cae hasta un 80% el tráfico. Habilitamos a las organizaciones de verificación de datos que publiquen una información relacionada, para que la gente vea lo que es verídico y lo que no», detalla.

Por parte de Google, se ha puesto en marcha el proyecto Trust para que las noticias falsas no salgan en las búsquedas. Sin embargo, Korhonen asume que «la verdad no es binaria, no es blanca o negra y establecer la confianza en un contenido tampoco. Dependemos de una serie de indicadores lo que es digno de confianza y lo que no lo es», señala.

Facebook en Barcelona

El directivo de Facebook descartó confirmar la apertura de un centro de revisión de contenidos tóxicos de Facebook en la Torre Agbar de Barcelona, una noticia adelantada por Cinco Días este lunes. Wrenn sí apuntó a que este tipo de trabajos van en la senda de lo que la firma llama la seguridad y protección para el usuario. Como avanzó este diario, se trata de una instalación a semejanza de la que dispone en Essen, a través del proveedor CCC, en el que se borran contenidos de odio, cuentas falsas, además de mensajes, fotos y vídeos que puedan afectar a actividades delictivas como la apología del terrorismo o a la privacidad del usuario. La red social aumentará este año de 15.000 a 20.000 los efectivos destinados a esta tarea.

«A las personas les gusta que el contenido sea auténtico», afirma Wrenn. «A principios de año, Facebook redujo el número de noticias que se visualizan por los usuarios y nos comprometimos a que las que aparecen fueran de calidad, de ahí los verificadores. Estamos cambiando el algoritmo y aprecerán más noticias pero de fuentes contrastadas y más noticias locales en función de los intereses de los usuarios. Puede ser un ente externo el que decida cuáles son las fuentes contrastadas, o que sean los propios usuarios pero la objetividad es importante», explicó el representante de Facebook.

Pero si el problema es de la sociedad, cobra de nuevo importancia  la figura de los medios como curadores de la información y desenmascaradores de los fake news. Y eso sabiendo que «los periodistas no están entrenados para hacer frente a esto», dijo Caño. «Cuando una noticia está ya instalada en la mente de la opinión pública, ya es muy difícil hacerle frente», explicó Cristophe Berti, director del diario francés Le Soir. La página web de su medio fue hackeada, copiada y se introdujeron noticias falsas sobre la campaña electoral del actual presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron

Fuente: Cinco Días