Atomico, la firma europea de capital riesgo creada por los fundadores de Skype, ha fichado como socio al reconocido emprendedor y business angel Alexis Bonte para acelerar su actividad de inversión en España, donde ya han llevado a cabo tres inversiones. La primera en 2011, cuando lideraron una inversión de 13 millones de dólares para Fon (fundada por Martin Varsvasky), y posteriormente en 2016 y en mayo de 2017 cuando lideraron sendas inversiones de 42 millones y 10 millones, respectivamente, para JobandTalent y Ontruck, la startup creada por el fundador de La Nevera Roja, Iñigo Juantegu.

En total, hasta ahora, han participado en rondas de financiación que suman 65 millones de dólares en startups españolas (52 millones solo en los últimos dos años), “pero tenemos mucho más dinero para invertir en proyectos adecuados. Estamos gestionando 1.500 millones de dólares, tras levantar un fondo de 765 millones en enero de 2017, y la idea es invertir el 80% de este nuevo fondo en Europa”, dice Bonte, conocido por formar parte de la primera ola de nuevas empresas de internet.

Este francés, casado con una española, fundó eRepublik Labs, una conocida empresa europea de videojuegos, que vendió a Stillfront Group en junio de 2017, y ocupó durante seis años diferentes cargos de responsabilidad en Lastminute.com, la agencia de viajes online vendida en 2005 a Sabre por 1.100 millones de dólares. También fue cofundador de la asociación de empresarios digitales Chamberi Valley, una comunidad construida en Madrid por emprendedores con el objetivo de ayudarse entre ellos y que hoy se ha convertido en un gran hub de compañías de base tecnológica.

“Alexis tiene una profunda visión del mercado [emprendedor] que nos ayudará a encontrar y apoyar a las startups y CEOs más ambiciosos de España”, asegura la socia de Atomico en España, Carolina Brochado.

Bonte lleva vinculado a Atomico desde noviembre de 2016, aunque explica que hasta ahora su tarea era la de “asesorar a las empresas participadas por el fondo” con el fin de que pudieran escalar. “Ahora soy socio y ayudaré a localizar empresas en España, Francia, Portugal, tres países que conozco muy bien, y donde lideraré inversiones”. Bonte aclara que va a cubrir específicamente tres verticales: el de videojuegos y viajes, por su experiencia en ambas industrias, y el de blockchain, “un área que sigo desde hace mucho tiempo”.

El nuevo socio de Atomico cree que el ecosistema de startups español ya ha alcanzado una madurez como para ser un mercado interesante para los fondos más grandes. “Cuando yo llegué en 2007 había muy poca gente invirtiendo aquí, pero ahora hay muy buenos venture capital que invierten en las fases iniciales, como Kibo, K Fund, Samaipata Ventures o Seaya Ventures, pero falta presencia de fondos capaces de hacer cheques de 5 , 10, 15 o 20 millones de euros”. Justo donde es fuerte Atomico, cuya inversión mínima está en esos cinco millones.

Bonte dice que solo entran en startups con ambición global, «no basta con que quieran ser fuertes a nivel local o europeo». Atomico invierte en firmas que puede ayudar a escalar internacionalmente. «En España no hay muchas, pero sí más de las que pensamos. Probablemente hay una docena que podrían ser candidatas, y no todas están en Madrid y Barcelona”. Este experto presume del equipo experimentado con el que cuenta Atomico para ayudar a acelerar los proyectos en los que invierten. Y destaca el caso de Niall Wass, quien fue responsable de la expansión internacional de Uber. «Antes de que el entrara, el negocio internacional de esta empresa era inferior al 10% y después de estar dos años superaba el 60%». 

El secreto del éxito

Bonte, que combinará su trabajo en Atomico con su puesto de CEO en eRepublik Labs, explica por qué ha decidido ser socio de este fondo. “Siempre me gustó mucho, porque tiene ese ángulo de fundadores que hacen inversiones [uno de sus fundadores es Niklas Zennström, emprendedor en serie que cofundó Skype y Kazaa] y cuenta con una filosofía que comparto, y es que las buenas empresas vienen de cualquier lado, no solo de Silicon Valley o Londres”.

Este experto en el ecosistema emprendedor europeo cree que en España hay cada vez más proyectos interesantes al haber emprendedores con más experiencia, “pues muchos de ellos es la segunda vez que arrancan una startup”. Además, hay más comunicación entre los propios emprendedores y los inversores, lo que se traduce en más know how en el ecosistema. “Y a todo ello hay que sumar una ventaja que siempre tuvo España: el acceso a talento. Aquí hay muchos desarrolladores y muy fieles, algo que no se logra en Silicon Valley y que cada vez es más difícil tener en Londres. Y muchas veces el secreto del éxito de una startup no está en que tenga un equipo muy fuerte y que tenga acceso a dinero, sino que consiga mantener el talento”.

Fuente: Cinco Días