Los lobbys empresariales españoles están renovando sus caras, y han elegido dos de prestigio indiscutible. Francisco J. Riberas (Madrid, 1964), presidente ejecutivo de Gestamp, presidirá el Instituto de la Empresa Familiar, y John de Zulueta (Cambridge, EEUU, 1947), ex consejero delegado de Sanitas, será su homólogo en el Círculo de Empresarios. Ambos nombramientos están pendientes de aprobación, en mayo el primero y en marzo el segundo.
“No olvidar nunca que el proyecto está por encima de las individualidades y que el corto plazo no puede perjudicar la estrategia a largo”, responde Francisco Riberas cuando se le pregunta qué es lo más importante en una empresa familiar. Habla por experiencia. Él y su hermano Jon heredaron la responsabilidad de dirigir las empresas del grupo de Francisco Riberas padre. Juntos copresiden el holding familiar, Acek; Jon dirige la acerera Gonvarri, y Francisco, Gestamp, especializada en diseñar y fabricar componentes metálicos para el sector del automóvil. Durante su mandato ha sacado la compañía a Bolsa y ha continuado su expansión internacional, con presencia ya en 21 países y más de 36.000 empleados.
Francisco Riberas es licenciado en Derecho y en Ciencias Económicas y Empresariales (Icade) por la Universidad Pontificia Comillas, que recuerda como “una gran escuela” en la que pudo coincidir con gente que comparte sus valores “de esfuerzo y de trabajo duro”. Sigue vinculado a ella a través de su Club Empresarial. Comenzó su carrera profesional en 1989, ocupando diferentes posiciones en Gonvarri, entre ellas, la de director de desarrollo corporativo y posteriormente la de consejero delegado. En 1997 promovió el nacimiento de Gestamp, asumiendo el cargo de consejero delegado desde los inicios y el de presidente desde 2010.
Riberas está casado y tiene dos hijas y un hijo, todos mayores de edad. “Mis hijos conocen y han vivido la empresa desde pequeños”, cuenta. “Están comprometidos con el proyecto a largo plazo, como futuros accionistas y gestores, siempre que quieran y puedan aportar valor al grupo”.
Practica diversos deportes (tenis, pádel, correr y esquí) y es aficionado al arte. Además, está comprometido con el fomento de proyectos empresariales en crecimiento a través de la Fundación Endeavor. Y es consejero de Telefónica, entre otras empresas.
El nuevo presidente del Instituto de la Empresa Familiar pertenece desde 2015 a su junta directiva, aunque Gestamp está en la organización desde hace más de 20 años, casi desde la fundación de esta. Considera que su futuro nombramiento “es una responsabilidad y un orgullo”. El IEF “es una institución ejemplar que ha hecho una labor muy positiva representando en la sociedad la voz y la labor de las principales empresas familiares de este país”, explica. Y concluye: “Espero estar a la altura que merece”.
John de Zulueta Greenebaum también tiene una historia familiar interesante: por parte de madre (Carmen de Zulueta, cuyo apellido ha antepuesto al de su padre) es sobrino-nieto del líder socialista Julián Besteiro, y nieto de Luis de Zulueta, ministro de Estado (de Exteriores) durante la República, en el Gobierno de Manuel Azaña. Con Luis, exiliado, pasó bastante tiempo durante su infancia, en EE UU y luego en Brasil, donde su padre, miembro de una familia de banqueros de Chicago, vio oportunidades de negocio.
Se licenció en Historia Contemporánea por la Universidad Stanford de California e hizo un MBA en Columbia, en Nueva York. Comenzó a trabajar en Boston Consulting Group y luego en Pepsico, con la que regresó a España, para dirigir Matutano desde Barcelona. Se casó con una catalana, a la que conoció jugando al squash, y tienen un hijo. Se trasladó a Madrid al fichar por Schweppes, y de ahí pasó a Sanitas, de la que fue consejero delegado durante 14 años. Luego fue presidente no ejecutivo de USP Hospitales entre 2009 y 2012. Su carrera se ha caracterizado por poner en vereda empresas con grandes posibilidades pero con problemas de gestión.
Ahora es consejero de Línea Directa Aseguradora, socio director de Point Lobos y asesor sénior de Candesic, consultoras ambas. Además, es consejero de la Universidad Europea y preside el Comité de Sanidad del Círculo de Empresarios, del que es socio desde 2004 y de cuya junta directiva es miembro desde 2015. También encabezó durante cuatro años la Fundación Exit, que trabaja en la inserción laboral de jóvenes en riesgo de exclusión social.
Riberas y De Zulueta pondrán ahora al servicio de dos grandes grupos de presión su prestigio y su solvencia demostradas, en una situación económica con mejores perspectivas, pero retos eternos, como la sucesión en la empresa familiar, y otros de gran actualidad, como los salarios.
Las votaciones, en marzo y mayo
La asamblea general de socios del Círculo de Empresarios renovará el 20 de marzo la mitad de la junta directiva, y el nuevo consejo votará a su futuro presidente, que será con toda seguridad John de Zulueta, el único candidato seleccionado por la comisión de nominaciones. Su mandato será de tres años, como el del presidente cesante, Javier Vega de Seoane.
En el Instituto de la Empresa Familiar, los mandatos del presidente duran dos años, improrrogables. La asamblea de socios celebrará su reunión anual el 8 de mayo, en la que se votará la elección de Francisco Riberas, elegido por unanimidad como candidato por la junta directiva, a propuesta del presidente saliente, Ignacio Osborne. El IEF agrupa un centenar de empresas familiares, cuya actividad equivale al 17,5% del PIB español.
Fuente: Cinco Días