Los sindicatos, liderados por CC. OO., que ostenta la mayoría en la representación sindical, pidió este viernes al Santander que los ajustes de plantilla en los servicios centrales de esta entidad con el Popular, adquirido en junio, no incluyan despidos. Reclamaron que solo se utilicen las prejubilaciones, las bajas incentivas y los traslados a empresas filiales del Santander, como las de tecnología. En el primer encuentro de esta mañana el banco no ofreció datos, ni la cantidad de personas a las que pudiera afectar ni las condiciones de salida, que son la clave en estos procesos. Por el origen de las bajas, los servicios centrales, solo abarcará a empleados de nivel medio y alto.

En cualquier caso, en abril de 2016 el Santander redujo la plantilla en 1.380 personas, a través de un ERE y bajas incentivadas. Pese a la utilización de la fórmula del ERE en aquella ocasión, fuentes de CC. OO. aseguran que «no se puede considerar que eran despidos. Ahora tampoco queremos despidos; le hemos dejado claro al banco que no queremos medidas traumáticas. Por eso es importante que se abra la vía de la movilidad interna, que incluya la posibilidad de ir desde los servicios centrales a las oficinas», según fuentes de CC. OO. Sobre las condiciones, los sindicatos esperan que el Santander ofrezca las mismas que en el recorte de plantilla de abril de 2016.

 Algunas fuentes apuntaron una cifra inicial aproximada de 1.500 bajas sobre una plantilla en servicios centrales de 7.000 personas, lo que un 21,4% del total. También indicaron, fuentes no oficiales, que podrían ofrecer las bajas a los empleados a partir de 53 años siempre que acumulen alto número de años trabajados en la entidad.

En un comunicado, Comisiones Obreras pidió que la integración del Popular se haga «siempre desde la proporcionalidad, la compensación adecuada y la voluntariedad de las personas

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afectadas». CC. OO. explicó que la negociación afectará solo a los servicios centrales del Popular y el Santander, y no afecta al Banco Pastor al no tener servicios centrales.

El sindicato explicó que las redes de oficinas de ambas entidades no van a ser de ningún modo objeto de esta negociación, y no habrá ningún movimiento en este sentido hasta la pérdida de la personalidad jurídica, prevista para el año 2019.

El proceso que ahora se inicia se realiza al amparo de lo contemplado en el artículo 12 del vigente convenio colectivo de banca que recoge el recurso preferente a medidas de flexibilidad interna (movilidad funcional, excedencias, modificación condiciones de trabajo o suspensión de los mismos) y la apertura de un proceso de negociación previo antes de la aplicación de cualquiera de los procedimientos legales previstos en el Estatuto de los Trabajadores.

Fuente: El País