Macaronesia Films es el resultado de un cúmulo de diferentes conversaciones cruzadas. Reflexiones que, durante mucho tiempo rondaron en la cabeza de varias empresas canarias, muchas de ellas del sector turístico, pero relacionadas, de alguna manera, con el cine. La idea que sobrevolaba era que, por fin, alguien debía apostar firmemente por diversificar la economía del archipiélago. Y lo hicieron. Macaronesia Films se crea en mayo del 2016 fruto de la unión de Nostromo Pictures, el Grupo Mur, Satocan, Agencia Marítima Afroamericana , Lanzateide, Lopesan y Contactel. Hoy es la empresa referencia del sector, principalmente en producciones nacionales.
Liderando este proyecto se encuentra Jaime Romero Cerdá. Este joven empresario ha centrado su carrera profesional en la planificación , apoyo estratégico y gestión empresarial en entidades públicas y privadas , de dentro y fuera del archipiélago , en sectores muy diversos como el sector público , la banca, automóviles, alimentación, hoteles o el textil.
De hecho, abandonó su cargo de concejal en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria para dedicarse a lo que él mismo ha considerado su sueño y su vida. “Nuestra vocación es puramente industrial”, señala el consejero delegado de Macaronesia Films, “dando un paso hacia delante, haciendo una apuesta de inversión que nos permitiera cubrir necesidades que antes no existían en Canarias y que, hasta ahora, obligaban a las producciones a traer mucho material y personal de fuera. Aquí no había proveedores especializados”. Macaronesia ofrece camiones de vestuario , de cámara, de maquillaje , de producción, equipamiento , descanso y energía , explica Romero.
Esta estrategia empresarial se sustenta en una apuesta del Gobierno central por el sector audiovisual en España, a través de los incentivos fiscales. Canarias, además, reforzada por su Régimen Económico y Fiscal, se encuentra en una posición que le permite ser competitiva con otros destinos de rodaje. En 2017, se introducen unas modificaciones que incrementan el nivel de ayudas. Por rodar una película española en Canarias se obtiene , sobre el primer millón, el 45% de deducción fiscal. Por una película extranjera , se recibe el 40% de ahorro a través de devolución de impuestos. Esto compensa la complejidad de rodar en el archipiélago por su lejanía e insularidad. Además de estas deducciones directas, el Archipiélago ofrece otros dos incentivos aplicables a la producción audiovisual en las islas. El tipo 0% del IGIC para todas las entregas e importaciones de bienes y prestaciones de servicios con destino a la ejecución de obras audiovisuales.
Y por otro lado, la Zona Especial Canaria, que permite que una empresa que desarrolle actividades relacionadas con el sector audiovisual puede constituirse como entidad ZEC, y tributar a un tipo impositivo reducido del 4% en el impuesto de sociedades. “Canarias está generando un gran interés para la industria de la animación, se sienten atraídas por este incentivo de la ZEC”, explica Natacha Mora, coordinadora del departamento audiovisual de Canarias Cultura en Red y de Canary Island Films, “dado el impacto en la contratación de jóvenes que conlleva.
De hecho, en el último año, las empresas que solicitan inscribirse en la zona ZEC se ha duplicado. Muchas de las cuales, aunque no todas, están relacionadas con el sector de la animación”. “Además de los incentivos , ofrece otra serie de ventajas muy valoradas por los productores: variedad y cercanía de localizaciones, clima estable todo el año, más de 4.000 horas al año de luz natural , conexiones aéreas y marítimas, oferta hotelera para todos los gustos y bolsillos , experiencia profesional e institucional, y Seguridad , somos Europa”, concluye Mora.
“Queremos, poco a poco, estabilizar esta actividad. Las producciones estaban viniendo de manera aislada. Estamos rompiendo esa inercia. Queremos dar recurrencia a los rodajes, generar talento y que cada vez, sea más fácil rodar en Canarias” , continúa Romero Cerdá.
De hecho, la Estrategia Operativa de Internacionalización de la Economía Canaria elaborada por PriceWaterhouseCoopers para el Gobierno de Canarias reconoce tres sectores claves como nichos de negocio con mayor potencial: el sector audiovisual, la reparación de plataformas y las empresas tecnológicas. El estudio reconoce al sector audiovisual como el más desarrollado en el intento por internacionalizar la economía canaria y atraer capital foráneo.
Silencio, se rueda
- Macaronesia Films cuenta con seis empleados fijos, centrados en atraer proyectos. Para una producción media suelen contratar a unas 70 personas. En un año y medio de actividad han trabajado en nueve películas: Perdida, Ajedrez para Tres o El Faro de las Orcas, entre otras. Industria.
- La empresa SurFilm cubre el área de proyectos internacionales. Fue la responsable de traer a Canarias La Guerra de las Galaxias, por ejemplo. Esta empresa se creó en 2004 y ofrecía en sus inicios servicios de producción en publicidad. Ha trabajado en una veintena de producciones. Siete de ellas para diferentes estudios de Hollywood, como Fast & Furious 6, Allied o Jason Bourne 5, así como una decenas de series de Televisión.
- En los últimos cinco años, en las islas se han rodado 87 producciones nacionales e internacionales, según eel Gobierno de Canarias. En 2017, se rodaron en Canarias 27 proyectos, aunque este número es mayor, porque no se están constatando las producciones audiovisuales locales. Colaboración. Canary Islands Films, dependiente del Ejecutivo regional, promociona el destino y gestiona los trámites administrativos. “Pocos sectores tienen la suerte que tiene el cine en Canarias”, señala el CEO de Macaronesia Films, “todas las instituciones se están alineando para intentar sacarlo hacia delante. Exigencias.
- Los empresarios apuntan a que el Gobierno de Canarias debería pedir la competencia para calificar las películas como obra canaria con nacionalidad española, un requisito para generar el ahorro fiscal. O la posibilidad de incrementar el número mínimo de días de rodaje exigidos. También señalan que el único cabildo que da ayudas a este sector es el de Tenerife
Fuente: Cinco Días