Iberdrola ha  llegado a un acuerdo con la compañía Pavilion Energy para la venta de su cartera de contratos de suministro de gas natural licuado (GNL), por un volumen anual superior a 5 bcm, de transporte marítimo y de capacidad de regasificación en Reino Unido a largo plazo, así como otros contratos accesorios relacionados con el suministro de gas. El importe asciende a  115 millones de euros, según ha comunicado la compañía a la CNMV.

La compañía española explica que a partir de ahora se centrará «en el suministro a más corto plazo», con el objetivo de aprovechar «la tendencia natural del desarrollo de los mercados gasistas en Europa». Supone por tanto un cambio en la actual estrategia de aprovisionamiento de gas del grupo para cubrir las necesidades tanto de sus clientes finales como de sus centrales de ciclo combinado.

La venta culminará el 1 de enero de 2020, según ha informado la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán. La valoración final está sujeta a determinados ajustes al alza y a la baja ya previstos en el contrato, así como al valor del inventario de GNL transferido a la fecha de cierre de la transacción. 

La operación se enmarca dentro del plan de desinversión de activos no estratégicos por valor de 3.500 millones de euros anunciado por Iberdrola en sus Perspectivas Estratégicas 2018-2022. 

Tras esta venta, la compañía ya ha llevado a cabo desinversiones en 2018 y lo que va de 2019 por más de 1.700 millones de euros, prácticamente la mitad del objetivo establecido para el periodo de referencia. Esta venta se suma a otras como la del uso de la fibra óptica en España; los activos de generación convencional de Reino Unido; el negocio de almacenamiento de gas en Estados Unidos; la participación minoritaria en Tirme; la de su única planta termosolar, Puertollano, o la del edificio Torre Auditori, en Barcelona.

Fuente: Cinco Días