Con el tráfico aéreo mundial prácticamente desactivado, Aena ha señalado ante la CNMV que el derrumbe acumulado en el mes de marzo es del 45,5% hasta el día 24, respecto al mismo periodo de 2019. Y el desplome va a más. Ese mismo día 24, ha reconocido la empresa pública, los aeropuertos españoles sufrieron una reducción del 97% frente al mismo día del año pasado.

En este escenario, Aena ha indicado que las estimaciones publicadas en febrero dejan de tener validez. Sin tener en cuenta aún el efecto del Covid-19 se elevó entonces la previsión de crecimiento del 1,1% al 1,9%. Por el momento, añade la empresa, no es posible cuantificar una estimación razonable para el conjunto del año.

La compañía ha optado por un plan de reducción de capacidad, con el cierre de terminales en los principales aeropuertos, a lo que se suma la renegociación de contratos de servicios (seguridad, limpieza, mantenimiento, etcétera) y la eliminación de gastos no esenciales. Con ello se reduce un tercio, o en 43 millones de euros, la salida mensual de caja por gastos operativos.

Aena recuerda que sus aeropuertos tienen la consideración de infraestructuras de interés general, por lo que deben mantener un grado de actividad que garantice el servicio a la aviación comercial, carga aérea y servicios de seguridad. “El ajuste de capacidad, el recorte de gastos y, por tanto, la disminución en la salida de caja operativa mensual se modulará en función de la evolución del nivel de tráfico en semanas y meses futuros”.

Otra decisión, tal y como ha adelantado Cinco Días, es la de la paralización temporal del programa de inversiones, lo que supondrá una reducción mensual de las salidas de caja promedio de aproximadamente 52 millones de euros.

La empresa que preside Maurici Lucena dispone de caja y facilidades crediticias por de 1.350 millones de euros, a lo que se suma la capacidad de realizar emisiones a través del programa de Euro Commercial Paper (ECP) de hasta 900 millones de euros, de los cuales se han emitido 350 millones de euros. “La emisión de nuevos pagarés se evaluará en función de la disponibilidad de este mercado”.

De forma paralela, la dirección financiera tiene abiertas negociaciones con la banca para cargar su liquidez con nuevas facilidades y préstamos que serán firmados en los próximos días.

La política de dividendos, por último, vendrá especificada en la próxima convocatoria de junta de accionistas una vez que el grupo procedió a deconvocar la reunión del 31 de este mes. Una vez levantado el Estado de Alarma, Aena aún contará con un mes para formular la citada convocatoria.

Fuente: Cinco Días