We Company, la firma matriz de WeWork, aspira a una valoración de entre 20.000 y 30.000 millones de dólares, entre 18.000 y 27.000 millones de euros, según informan Bloomberg y The Wall Street Journal. La valoración media (22.000 millones de euros) está un 46% por debajo de la alcanzada en enero, cuando Softbank acudió a una ampliación de capital que valoraba WeWork en 47.000 millones de dólares, o 41.000 millones de euros.

WeWork todavía debate las condiciones para la venta de sus acciones y su valor puede cambiar según la demanda de los inversores, explican las mismas fuentes. La compañía, encabezada por Adam Neumann, entrará a Bolsa en un momento de turbulencias en los mercados por la guerra comercial entre China y EE. UU., que arrastró a Wall Street a su peor agosto en cuatro años. 

La baja valoración refleja que a pesar del crecimiento fulgurante de la compañía, existen sospechas que apuntan a un descuadre entre su endeudamiento y sus beneficios, así como desconfianza sobre su gobierno corporativo. 

El éxito de la compañía llegó con un modelo disruptivo de oficinas, de espacios dedicados al coworking o zonas compartidas de trabajo, alquileres de corta duración y puestos de trabajo enfocados fundamentalmente a las nuevas empresas tecnológicas, emprendedores o pequeñas compañías de consultoría. Aunque ha contado con otra novedad: no hace falta ser propietario de los inmuebles, ya que se pueden realquilar, a semejanza de lo que hace un gran operador hotelero que no es dueño de los edificios.

Fuente: Cinco Días