La dirección de Volkswagen Navarra y el comité de empresa han firmado este viernes en una reunión el nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que la compañía aplicará por causas organizativas y productivas a toda la plantilla -más de 5.000 personas- ante la vuelta a la producción de la factoría el lunes.

Según fuentes sindicales, ha sido firmado este viernes por UGT, CC OO, ELA y CCP y durará finalmente hasta el 31 de julio y no hasta el 5 de julio como se planteó en un principio, debido a que la incertidumbre en los mercados provocada por el Covid-19 se alargará durante todo el año.

La parte social ha recordado que este expediente entrará en vigor solo en el caso de que el actual por causa de fuerza mayor se quede sin efecto, así como que se mantienen las mismas condiciones económicas, por lo que los afectados percibirían el 100% de sueldo y antigüedad.

Por su parte, la dirección de la empresa ha asegurado que intentará hacer un trabajo organizativo en busca de un equilibro por el que toda la plantilla pase por el ERTE de manera equitativa, salvaguardando el personal considerado grupo de riesgo por el coronavirus.

Además, ha anunciado que va a adelantar 500 euros a cada trabajador de la paga extra del mes de junio en la nómina del mes de abril, con el objetivo de compensar el retraso que va a tener el pago del ERTE por parte del SEPE.

Volkswagen Navarra ha actualizado su programa productivo para al año completo y perderá 53.000 coches por el impacto del coronavirus. En total, se ensamblarán 253.714 vehículos en la factoría navarra, frente a los 306.645 previstos a principios de año.

La compañía aplicó un ERTE por causa de fuerza mayor a sus más de 5.000 empleados cuando el Gobierno decretó el estado de alarma. La planta, donde se ensamblan los modelos Polo y T-Cross, cerró el pasado 15 de marzo ante la falta de personal y por no poder garantizar la salud de los trabajadores.

Fuente: Cinco Días