La investigación, el desarrollo y la innovación son factores clave en la competitividad y productividad de las empresas y parte esencial para lograr el liderazgo en el mercado. Las grandes multinacionales lo saben y por ello dirigen gran parte de sus esfuerzos —y dinero— a proyectos de I+D+i. Pero, ¿cómo lo hacen? Te contamos el caso de Grifols, ING e Iberdrola, tres compañías de sectores totalmente diferentes: salud, finanzas y energía.
- Grifols, apoyo dentro y fuera de su organización
La compañía, especializada en el sector farmacéutico y hospitalario, se orienta a promover la mejora continua de los productos y operaciones existentes para operar con mayor eficiencia. También dedica muchos recursos a identificar y materializar colaboraciones con los diversos agentes del sistema de innovación, incluyendo el ámbito académico e investigador. Además, gestiona proyectos e inversiones en compañías de investigación. Impulsa su innovación a través de la Grifols Innovation Office, una oficina que tiene como objetivo evaluar y acelerar el desarrollo y comercialización de terapias innovadoras, productos y servicios a través de inversión interna y externa.
«La innovación en Grifols es uno de los pilares fundamentales en la estrategia de crecimiento de la compañía y la entendemos de manera integral. Promovemos proyectos de investigación propios, como, por ejemplo, el tratamiento del alzhéimer con albúmina (una de nuestras proteínas plasmáticas), pero también apoyando los de nuestras compañías participadas», afirma Nuria Pascual, directora financiera y de relaciones con inversores de Grifols.
Los esfuerzos de la empresa en materia de I+D+i le han llevado por cuarto año consecutivo a ser considerada por la revista Forbes como una de las 100 compañías más innovadoras del mundo, y una de las 1.000 compañías del mundo que más invierten en innovación y desarrollo, según el informe 2016 Global Innovation 1000, que anualmente elabora la consultora PwC. La compañía destinó 293,4 millones de euros a inversiones internas, externas y a través de la adquisición de participaciones en empresas de investigación, lo que representó el 7,3% de los ingresos del grupo.
- ING involucra a sus empleados y clientes
Para desarrollar productos que realmente los clientes necesiten, ING ha puesto en marcha un programa en el que los empleados del banco co-crean con los clientes, tal como asegura su directora de innovación, Arantxa Sarasola. «Aunque co-crear sea una palabra muy de gurú, realmente desde ING lo llevamos a cabo. Desarrollar algo nuevo implica muchísimo esfuerzo y trabajo, unos recursos que vale la pena destinar si el proyecto funciona, pero que generan mucha frustración si luego no interesa», explica Sarasola.
Para ello, el banco selecciona a tres personas de su propia plantilla: una con un perfil de negocio, otra con una gran experiencia de usuario y otra, especializada en marketing. Según el caso, también pueden incluir a otra persona de desarrollo. Los componentes de este equipo dejan aparcado su trabajo diario por un periodo de entre cuatro semanas o tres meses, dependiendo de si el reto es más pequeño o más amplio. También son apoyadas por expertos, de dentro o fuera de la organización.
La dinámica comienza buscando una necesidad que tengan los clientes. Para ello, intentan descubrir qué está pasando fuera, qué está haciendo la competencia, qué se está desarrollando en otros países… Tras identificar una posible necesidad, entrevistan a sus clientes para saber si verdaderamente existe en el mercado. Por último, un grupo —al estilo de una mini startup— comienza a desarrollar una solución que logre cubrir esa carencia.
Entre los proyectos llevados a cabo bajo esta dinámica se encuentra Twyp. Desde el banco se dieron cuenta de que los clientes necesitaban nuevas formas de conseguir efectivo. Se plantearon algunas ideas que fueron descartadas por los clientes a los que se consultó, bien por falta de confianza o vergüenza. Fue el caso de la posibilidad de que alguien de alrededor pudiera dar dinero al que lo necesitase o de que una furgoneta llevara a las casas el efectivo. Pero tras una investigación profunda se llegó a la idea que hoy da forma a la aplicación: poder retirar dinero de gasolineras y supermercados DIA. Meses después de su lanzamiento, el servicio se ha expandido y ya puede utilizarse por clientes de cualquier banco.
- Iberdrola, ‘startups’ para innovar
La energética cuenta con un programa de capital riesgo corporativo: Perseo, dotado con 70 millones de euros de presupuesto que busca asegurar la sostenibilidad del modelo energético en el futuro. Desde que fue puesto en marcha en 2008 se han invertido más de 50 millones en startups tecnológicas de todo el mundo.
A nivel internacional, entre las principales inversiones de Perseo, destaca la realizada en la compañía Stem, ubicada en Silicon Valley. Una empresa que ofrece ahorros a sus clientes comerciales e industriales mediante soluciones de almacenamiento energético que combinan técnicas de análisis predictivo, cloud computing y big data junto con baterías. Mientras que a nivel nacional, una de las principales apuestas de Iberdrola es Arbórea Intellbird, una compañía salmantina que comercializa la inspección con drones para infraestructuras energéticas. Solo en 2016 inspeccionó más de 600 palas de aerogeneradores.
Desde 2009, el grupo ha duplicado su presupuesto anual destinado al área de innovación. En concreto en 2016 invirtió 211 millones, que se repartieron en más de 200 proyectos relacionados con la generación limpia, la eólica marina, las redes inteligentes, las nuevas tecnologías y modelos de negocio y el aprovechamiento de las oportunidades que ofrece la digitalización en todos sus ámbitos.
Según la consultora PwC, Iberdrola es la cuarta energética del mundo por inversión en I+D+i, pero ¿por qué? «En Iberdrola entendemos la innovación como un eje central de nuestra estrategia, por lo que la actividad no la compartimentamos en centros de investigación sino que trasciende a todas nuestras áreas de negocio, que se estructuran fundamentalmente en Generación y clientes y Redes y Renovables», explican desde la compañía.
Fuente: El País