Tener una vida social de calidad parece cada vez más difícil. Los planes a los que nos invitan amigos y compañeros de trabajo, por lo general, requieren invertir tiempo, dinero o ambos. Normalmente, cuando queremos escaquearnos porque no hemos gestionado bien nuestras horas libres o no nos apetece, el tiempo y el dinero suelen ser nuestras excusas. Hay poca bibliografía que estudie esta relación de amor-odio con los planes sociales, pero una investigación reciente parece haber llegado a una conclusión sobre cuál es la mejor forma de decir que no.

El objetivo del estudio, llevado a cabo por The Ohio State University (en Estados Unidos), es descubrir cómo otros perciben esta comunicación y cómo nuestras excusas afectan nuestras relaciones de amistad. La investigación describe los efectos de la forma en que rechazamos planes analizando datos de conversaciones reales en Twitter y realizando tres experimentos de laboratorio. Los resultados llegan a una conclusión clara: decir que no tienes suficiente tiempo puede dañar las relaciones, alegar que no tienes suficiente dinero puede ayudarnos.

  • El drama de las bodas

Recibir una invitación de boda puede ser uno de esos momentos en los que romperse la cabeza para decidir si ir, no ir y qué explicación dar. Las responsables del estudio reunieron una muestra de 327 parejas que vivían en Estados Unidos, que estaban planeando su boda y que habían enviado las invitaciones. Les preguntaron cuántos invitados habían rechazado su invitación por no tener suficiente dinero o tiempo. En promedio, los participantes informaron haber recibido la misma cantidad de excusas con un motivo u otro.

Para tener una información más completa, también les pidieron que señalaran cómo de cercanos se sentían de aquellos amigos que habían puesto estas excusas. Dijeron que, antes de recibir la respuesta, se sentían igual de cerca de todos los invitados que habían rechazado ir. Pero después de recibir el porqué, aseguraron que se sentían menos cerca de los invitados que decían no tener tiempo que de los que decían no tener dinero suficiente. 

¿Por qué los amigos se toman peor el rechazo si decimos que no tenemos tiempo? La respuesta tiene que ver con la credibilidad y con la capacidad de control personal. A las parejas que participaron en el experimento les parecía más creíble la excusa del dinero, en parte porque creían que el amigo probablemente tenía menos control personal sobre ese aspecto que sobre la falta de tiempo. 

«Debido a que pensamos que los demás deberían tener más control sobre su tiempo, pensamos que deberían ser capaces de encontrar un hueco para hacer las cosas que realmente quieren hacer», explica en HBR Grant Donnelly, profesora y doctorada de la Escuela de Negocios de Harvard. «Por lo tanto, es más probable que nos tomemos mal que no hayan sacado un rato para nosotros: esto afecta a lo cerca que nos sentimos de ellos».

En realidad, decir que estás más ocupado se traduce en los oídos del de enfrente en que tienes cosas mejores que hacer o que no es tu prioridad: la persona escucha que no la valoramos. En cambio, decir que vas mal de dinero es percibido como algo honesto, lo que genera más sentimientos positivos y de buena voluntad. Otra opción es decir que no te quedan fuerzas o energía, porque los demás perciben que la energía es menos controlable que el tiempo.

Fuente: El País