El grupo PSA, a través de la dirección de Opel España, ha comunicado a los representantes de los trabajadores de su planta de Figueruelas (Zaragoza) que ha decidido paralizar el proyecto del nuevo Corsa en este centro y que busca una nueva localización para la fabricación de este vehículo. Ante este anuncio, el comité de empresa de Opel España ha manifestado que no puede aceptar ni compartir «la decisión unilateral que ha tomado la dirección, respecto a la negociación en la planta de Figueruelas (Zaragoza) y la afección en las inversiones, con unas consecuencias graves para la plantilla y la industria de Aragón».

Los representantes de los trabajadores creen que este anuncio de la empresa es una amenaza ante la diferencia que hay entre ambas partes en la negociación del convenio. «La dirección nos ha trasladado la decisión unilateral que han tomado, respecto a la negociación en la planta de Figueruelas y la afección en las inversiones, con unas consecuencias graves para la plantilla y la industria de Aragón», ha indicado el comité en un comunicado.

Como primera medida, el comité de empresa ha convocado este jueves, día 25 de enero, a todos los trabajadores del turno de mañana y central a una concentración a la ‘hora del bocadillo’, a las 9.35 horas, para trasladar a la dirección su rechazo y malestar con la decisión tomada, ha indicado la presidenta del comité, Sara Martín.

«No podemos compartir ni aceptar esta decisión unilateral. La decisión tomada por unanimidad en el comité de empresa fue la de suspender, que no romper, unas negociaciones en las que la empresa sólo quiere hablar de sus propuestas. Esa suspensión está condicionada a que la dirección acepte los condicionantes que todos conocemos y que incluye, sobre todo, un plan industrial para las dos líneas y los tres turnos».

El comité ha instado a la empresa a que «reconsidere la decisión adoptada hoy y que acepte estos condicionantes» que les permitiría «volver a la mesa de negociación para tratar de alcanzar un acuerdo de convenio deseado por todos, que garantice las inversiones y el futuro de la planta y que a la vez sea compatible con unas condiciones laborales dignas para los trabajadores».

Martín ha afirmado que sus «propuestas son honestas y serias» y no «hemos dicho nunca que rompemos la negociación sino que se suspende hasta que la dirección no acepten los cinco puntos que les presentamos, entre los que se encuentra un plan industrial que sería muy beneficioso para ambas partes».

Fuente: El País