Liberbank obtuvo un beneficio neto de 110 millones de euros al cierre del ejercicio 2018, frente a las pérdidas de 259 millones de euros registradas un año antes debido al impacto de las provisiones adicionales para el saneamiento de activos de 600 millones de euros que realizó la entidad durante el tercer trimestre de 2017.

El banco presidido por Pedro Rivero, que estudia su posible fusión con Unicaja, ha explicado este jueves que el ejercicio 2018 se ha visto favorecido por el dinamismo de la actividad comercial bancaria típica, el crecimiento de los márgenes de la cuenta de resultados y la reducción de costes, así como la mejora del balance y de la calidad de los activos.

Los ingresos netos por comisiones recurrentes crecieron en el ejercicio un 4,9%, hasta los 175 millones de euros. Las comisiones totales se situaron en 183 millones de euros. En este sentido, el margen de intereses creció un 11,5%, hasta los 453 millones de euros, a pesar de la disminución de los resultados por operaciones financieras, que cayeron un 62,7% y que propició que el margen bruto alcanzase los 640 millones de euros (-0,9%).

De su lado, el margen de explotación se elevó un 10,7%, situándose en 247 millones de euros gracias a la política de contención de gastos, que se redujeron un 8% y se situaron en 357 millones de euros. Los costes totales se situaron en 393 millones de euros, inferiores a los 400 millones de euros fijados como objetivo.

MÁS INFORMACIÓN

El balance de Liberbank alcanzó los 39.227 millones de euros a 31 de diciembre de 2018, lo que supone un incremento del 10,6% respecto a los 35.462 millones de euros de un año antes.

En este sentido, los recursos de clientes registraron un incremento del 4,6%, hasta los 29.628 millones de euros, con un aumento de los mismos en balance del 4,8%, alcanzando la cifra de 3.066 millones de euros, destacando fundamentalmente el impulso de los depósitos a la vista, que crecen un 6%.

Aumento del crédito

«Liberbank intensificó en 2018 la positiva evolución de los principales indicadores de actividad comercial, tanto en términos de volumen como de diversificación de líneas de negocio y de rentabilidad de la actividad minorista», ha destacado la entidad.

La actividad de financiación registró en términos de saldo vivo crediticio un crecimiento en todos los segmentos, pero principalmente en empresas y en crédito al consumo a las familias. El saldo total de crédito productivo se situó en 21.949 millones de euros, un 9,1% más.

La financiación de actividades productivas creció un 8,6%, hasta 5.683 millones de euros, mientras que el saldo vivo de financiación del consumo aumentó un 7,1%, hasta 803 millones de euros, y el hipotecario un 4,4%, hasta 13.485 millones de euros.

Morosidad por debajo del 5%

La tasa de morosidad de Liberbank disminuyó hasta el 4,94% al cierre del ejercicio, frente al 8,6% de un año antes, y el volumen de activos dudosos disminuyó en 758 millones de euros a lo largo del año 2018, hasta los 1.142 millones de euros.

Respecto a la cartera de adjudicados, Liberbank realizó ventas y transacciones por 900 millones de euros, de los que el 58% correspondió a suelo, fincas rústicas y obras en curso. De esta forma, la cartera de adjudicados al cierre de 2018 era de 1.960 millones, un 22,8% menor que el año anterior.

Asimismo, la entidad asturiana aumentó los niveles de cobertura de los activos no productivos hasta el 51%, con una mejora de 243 puntos básicos en el ejercicio, con lo que adelanta su balance de cara a la posible fusión con Unicaja. El proceso continúa en marcha y se encuentra en la primera fase de realización de auditoría de compra, en la que Mediobanca y Deutsche Bank están asesorando a las entidades.

Fuente: El País