La industria azulejera en España ha hecho un ajuste de producción del 6% en los cuatro primeros meses del año, ha dicho el presidente de Ascer, Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos, Vicente Nomdedeu. El directivo ha asegurado que para llevarlo a cabo y dar salida al stock que ya tenían las empresas, estas han puesto en marcha Expedientes de Regulación de Empleo Temporales (ERTE).

En 2018, el sector redujo su mano de obra un 1,3% (ahora mismo da trabajo en España a 15.400 personas de manera directa, la mayor parte en Castellón). Nomdedeu ha explicado que con el pasar de los meses, esperan que esa reducción de la producción se vaya atenuando.

Los datos negativos de empleo se dan a pesar de que las ventas de la industria cerámica aumentaron un 2,9% el ejercicio anterior, hasta los 3.597 millones de euros. El dato, aunque positivo, es menor que el de años anteriores debido a la ralentización del crecimiento de las exportaciones (subieron un 1,5% en 2018). Por su parte, el mercado nacional creció un 7,5%, hasta los 870 millones.

En el primer trimestre de 2019, las exportaciones siguieron a un nivel similar al de 2018, con un aumento del 2%. En el contexto internacional, Nomdedeu ha alertado sobre las políticas proteccionistas y el Brexit, como factores de riesgo para el sector. Sin embargo, el directivo ha señalado que sorpresivamente Reino Unido, que es un mercado estratégico para España, es el país donde más crecen las ventas de azulejo español dentro de la Unión Europea. Las comercializaciones a Argelia, sin embargo, debido a la imposición de aranceles en el país, han caído un 83% en el año.

Por su parte, el mercado de EE UU creció en 2018 un 10,9% y en el primer trimestre de este año siguió subiendo otro 10%. «Le estamos robando cuota de mercado a los italianos, nuestro principal competidor», ha señalado Nomdedeu, quien ha asegurado que las empresas españolas fabrican más barato y con más calidad que las italianas.

El desafío de sustituir el gas

Nomdedeu ha advertido de que el sector tiene que buscar alternativas a la producción con gas en el medio plazo. Además, ha alertado de riesgos para la industria de los azulejos como la subida de impuestos, la inseguridad jurídica y el posible aumento de costes a las empresas. «Pedimos más cautela en la transición energética, no se puede hacer en cuatro días [en referencia al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030]».

«Es imprescindible un ajuste de la retribución al transporte y distribución del gas que implica una fuerte merma de competitividad de sectores industriales exportadores como el nuestro [según Ascer, son el tercero con mayor superávit comercial, detrás de la automoción y materiales de transporte]. Es necesario además desarrollar un estatuto de consumidores de gas intensivos que respalde al tejido industrial español», ha dicho Nomdedeu.

Fuente: Cinco Días