La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) aprobó ayer la fusión de los servicios de pago ServiRed, Sistema 4B y Euro 6000, propiedad de todos los bancos y cooperativas, bajo una única marca con algunas condiciones. Competencia quiere que este acuerdo siempre esté abierto a la posibilidad de que entren nuevos socios a este pacto, firmado en principio para cinco años. También les ha exigido que los acuerdos que tomen garanticen que haya mayor competencia en las aplicaciones de pago con tarjeta en España y que los precios fijados a terceros estén en línea con los de la Unión Europea.

La duda es cómo afectará a la guerra de cajeros iniciada por CaixaBank, por la que esta entidad y Santander y BBVA pasaron a cobrar unos dos euros por sacar efectivo de sus cajeros a los no clientes. Los tres servicios de pago suman 78,5 millones de tarjetas, con un volumen anual de 5.197 millones de operaciones y 307.818 millones de euros. Esta fusión supondrá que los 50.193 cajeros automáticos en funcionamiento actualmente en España operarán bajo la misma red interbancaria.

Detrás de este movimiento está la creación de una nueva tarjeta de pagos española que compita con Visa y Mastercard. La banca quiere ahorrarse los 60 millones de euros en comisiones que paga a estos dos gigantes de los medios de pagos. El sector quiere aprovechar la digitalización para ofrecer un medio avanzado, basado en el móvil, que sea útil para pagar en el extranjero mediante acuerdos con bancos internacionales. El proyecto es muy ambicioso y en el sector esperan la reacción de Visa y Mastercard, que no querrán perder su negocio.

Fuente: El País