El presidente de BBVA, Francisco González, ha reiterado que su edad de jubilación será los 75 años, que cumplirá en 2019, y ha apuntado que la entidad tiene «un equipo fabuloso», por lo que no habrá «sorpresas» tras su marcha. «Hace dos años, en Davos, dije que la edad de jubilación era de 75 años y eso no va a variar», ha insistido González durante la presentación de resultados de la entidad, que registró un beneficio atribuido de 3.519 millones en 2017, un 1,3% más, tras el impacto de las minusvalías latentes de 1.123 millones de euros por su participación en Telefónica.

El primer ejecutivo de la entidad ha apuntado que el día en que abandone BBVA será «triste», pero se marchará con «mucho orgullo» por lo que deje detrás. «Tenemos un equipo fabuloso y no va a haber sorpresas», ha añadido, sin desvelar quién será su sucesor en la presidencia.

En paralelo, ha afirmado que crear un impuesto a la banca para financiar las pensiones, como propuso el PSOE, sería «distorsionante» para la economía en el sentido de que se cargaría un tributo contra un sector y no contra el resto y al final se trasladaría a los clientes.

«Soy muy mayor para escuchar estas cosas. Las he oído muchas veces en la vida en países más como Bolivia que en Europa», ha señalado durante la presentación de resultados de la entidad, que registró un beneficio atribuido de 3.519 millones en 2017, un 1,3% más, tras el impacto de las minusvalías latentes de 1.123 millones de euros por su participación en Telefónica.

En todo caso, González ha apuntado que, ya que se habla de que la banca recibió ayudas, debería especificarse qué entidades las recibieron. «Son las cajas las que han tenido ayudas», ha sentenciado el presidente de BBVA.

Fuente: Cinco Días