«Tenemos la gran oportunidad de crear la mayor plataforma de infraestructuras del mundo», ha destacado esta mañana en rueda de prensa el presidente de ACS, Florentino Pérez, refiriéndose al pacto alcanzado con Atlantia para comprar Abertis, «este no es un acuerdo para trocear Abertis, es una alianza para que dure toda la vida». El empresario buscaba espantar de este modo cualquier temor del Gobierno español sobre el posible reparto de activos a corto plazo de la que hoy es una de las mayores referencias del Ibex. Sobrevuela una y otra vez la experiencia de Endesa con la toma de control de Enel.

Pérez ha comparecido junto al consejero delegado de su empresa y de Hochtief, Marcelino Fernández Verdes, y con el CEO de Atlantia, Giovanni Castellucci. Este último ha hablado de las oportunidades que se abren tanto para Atlantia como para la opada Abertis al acudir a nuevos mercados como Estados Unidos, Canadá y Australia de la mano de constructoras del volumen de ACS y Hochtief. Sobre esta última, en la que Atlantia tomará un 24,1% del capital, Castellucci ha afirmado que «es la mejor constructora del mundo». 

Los tres ejecutivos han dejado esta mañana poco más que la foto que ilustra una alianza que se antoja histórica para el sector de las infraestructuras. ACS nombrará al presidente de Abertis y Atlantia pondrá al consejero delegado. En ningún momento se han referido al futuro del actual equipo directivo que lideran Salvador Alemany y José Aljaro. Si bien, Florentino Pérez ha matizado que «seguro que hay personas de valía».

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Viejos conocidos

Florentino Pérez ha dado la categoría de «empresa amiga» a la que ha sido su rival durante meses por el control de Abertis, mientras Castellucci ha destacado el papel de ACS en la fundación y desarrollo de Abertis: «Durante años, detrás de cada decisión de Abertis ha estado el decidido apoyo de ACS y creemos que se puede trasladar esa experiencia e impulso a Atlantia». 

Entre 2006 y 2008, ACS y Atlantia coincidieron en las negociaciones para fusionar la italiana con Abertis, operación que fue claramente vetada por el Gobierno de Romano Prodi. «Nunca hablo de los Gobiernos. Aquélla fue otra operación y otro momento», ha sentenciado Castellucci desviando la primera pregunta de la rueda de prensa.

El ejecutivo italiano también ha evitado manifestarse sobre sus planes respecto al 34% de Cellnex, participación en manos de Abertis sobre la que la entidad italiana ha firmado una opción de compra a ejecutar antes del 23 de este mes. Pasar del 30% en la operadora de torres de telefonía supondría la obligación de lanzar una opa

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«¿Quién tomó la iniciativa para llegar a un acuerdo y unir las ofertas por Aebrtis?», preguntó otro redactor. «Todos al mismo tiempo», despejó Pérez desde una mesa que se había convertido en un verdadero frontón. Una y otra vez el presidente de ACS, que citó a Castellucci y «su visión empresarial» como claves para alcanzar la entente, se refirió al deber de no desvelar información sensible mientras no sea comunicada al mercado a través de la CNMV.

La foto del apretón de manos estaba hecha y ya se había lanzado el mensaje de que la alianza estable es a largo plazo. Poco más.

Un pacto por cerrar

 ACS, Atlantia y Hochtief han firmado un acuerdo de colaboración en proyectos de construcción y gestión de infraestructuras que, de funcionar, puede constituir la mayor potencia del sector.

Además, los grupos intercambian participaciones. Todo deriva del acuerdo para acabar con la batalla por Abertis y ofrecer a los accionistas de la concesionaria catalana una sola opa, la de Hochtief a 18,36 euros por cada acción de Abertis, lo que valora el 100% de la opada en casi 18.200 millones. Eso sí, se elimina el canje de acciones y, por tanto, la condición suspensiva de pagar en papel un 19,54% de Abertis. Bajo el nuevo modelo, la oferta se realiza en efectivo

El presidente de ACS, Florentino Pérez, entre los consejeros delegados de Atlantia y Hochtief, Giovanni Castellucci y Marcelino Fernández Verdes. El presidente de ACS, Florentino Pérez, entre los consejeros delegados de Atlantia y Hochtief, Giovanni Castellucci y Marcelino Fernández Verdes.

Al mismo tiempo, Atlantia, ACS y Hochtief crean una sociedad holding que se hará de forma casi automática con la participación en Abertis adquirida por la constructora alemana. Esa instrumental, en la que inyectarán capital por 7.000 millones, estará participada en un 50% más una acción por la italiana; ACS entra con un 30% del capital, y Hochtief se queda un 20% menos una acción.

Atlantia consigue su objetivo de consolidar Abertis, y ACS logra una participación paritaria sin cargar su balance de deuda.

El pacto incluye una ampliación de capital de 6,43 millones de acciones en Hochtief que ACS, propietaria actualmente del 71%, suscribirá a 146,42 euros por título. A continuación, el grupo de Florentino Pérez dará entrada a Atlantia en su filial alemana con una participación de hasta 2.500 millones de euros, lo que pondría en manos italanas un 24% de Hochtief.

La opa de ACS señalaba a Hispasat, el 34% de Cellnex y una porción de la concesionaria francesa Sanef como desinvertibles para aligerar la carga financiera que conlleva la oferta. El operador de satélites iría a manos de REE por algo más de 1.100 millones, pero sin generar plusvalías; la participación en el operador de torres de telefonía acabará en manos de Atlantia, que tiene una opción de compra. Y el 100% de Sanef, valorado en más de 5.000 millones, podría preservarse.

ACS buscaba integrar Abertis excluyéndola de Bolsa y haciéndola gestionar infraestructuras que salieran de la cartera de obra de Hochtief. Atlantia, por su parte, quería doblar su tamaño y diversificar mercados ante su fuerte exposición a las autopistas y aeropuertos italianos. Y ambas ambicionaban convertir el beneficio de Abertis en dividendos. 

Fuente: Cinco Días