Los vehículos de alquiler con conductor (VTC) tendrán el mismo límite horario que el taxi para prestar sus servicios en Madrid, según recoge el borrador de la ordenanza que el Ayuntamiento ha preparado y que someterá en las próximas horas a consulta de ambos sectores. El texto propone que las jornadas de los VTC sean máximo de 16 horas y que tengan dos días de descanso a la semana.

El borrador del Gobierno de Manuela Carmena también establece la prohibición de estos vehículos a estacionar a menos de 100 metros de nodos de transporte como aeropuertos, estaciones de tren o autobús, así como intercambiadores de transporte, siempre que estos dispongan de aparcamientos o estacionamiento para la subida y bajada de clientes. Así pretenden, dicen, evitar “la congestión de tráfico en las vías perimetrales”. La única excepción es cuando trasladen a una persona que vaya en silla de ruedas.

Igualmente, el borrador limita los viajes en vacío en función de la categoría ambiental de los vehículos, con un porcentaje máximo de kilometraje sin pasajeros en función de cómo de contaminante sea cada vehículo.

El Consistorio madrileño defendió este martes que este borrador es “un punto de partida desde el que se pueda debatir”, aunque añadió que recoge “las principales novedades que el Ayuntamiento quiere incluir en función de sus competencias” en ordenación del tráfico, uso del espacio público y protección del medio ambiente.

“Hubiéramos preferido una ordenanza que estuviera amparada y que tuviera un marco de regulación de la Comunidad de Madrid, pero como eso no ha podido ser, nuestro compromiso es la regulación de los VTC siguiendo los criterios del decreto del Gobierno [central]”, dijo la delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés.

Carmena, que busca regular el sector de los VTC en los viajes con origen y destino en Madrid ciudad, planea crear un registro municipal de autorizaciones de estos vehículos, similar al que ya existe con los taxistas, y exigirles que cuenten con hojas de reclamaciones.

Respecto a las jornadas máximas, los únicos vehículos que no tendrán limitación horaria serán los adaptados a personas con movilidad reducida. Y en el caso de las jornadas de descanso, con excepciones en fechas concretas. Los VTC no podrán fijar como punto de recogida ni de llegada los carriles bus, ya que estos vehículos tienen prohibido parar en estas vías. Podrían ser sancionadas con 200 euros.

Sin consenso, de nuevo

Unauto, la patronal de las empresas VTC, ha pedido hoy al Ayuntamiento de Madrid que abra un periodo de diálogo sobre el borrador de la ordenanza para evitar que se adopten medidas precipitadas “fruto de la presión del taxi, informa EP.

También, la Comunidad de Madrid volvió a mostrarse partidaria de dar «facilidades» al sector del taxi en vez de «limitar el margen de maniobra y la disponibilidad» de los VTC, porque, según ha explicado el vicepresidente regional, Pedro Rollán, con esa última opción «sobrará mano de obra». Rollán resaltó que el Reglamento del Taxi que anunció el otro día su gobierno está en un estado «muy avanzado».

Por su parte, el sector del taxi planea exigir al consistorio de Carmena otras medidas añadidas a las propuestas por el ayuntamiento. Según ha podido saber CincoDías, reclamarán que los conductores VTC tengan “igual prueba o requisito para igual trabajo” (un carnet similar a la cartilla del taxi o las mismas pruebas de acceso). También pedirán que establezcan limitaciones a estos vehículos en la almendra central de la ciudad, aunque este colectivo no confía mucho en que esta reclamación vaya a ser escuchada.

Tampoco podrán incluir la petición reiterada de los taxistas de que se establezca un tiempo de precontratación de los VTC de una hora como ocurrirá en Barcelona. El Ayuntamiento, en este caso, no tiene competencias para ello, salvo que la Comunidad le habilite para ello, algo a lo que se ha negado el gobierno regional presidido por Ángel Garrido.

Otra fuente consultada apunta a otro problema extra al que podría tener que hacer frente el Ayuntamiento con su futura ordenanza. «La CNMC podría recurrirla y el ayuntamiento tendría que hacer mejor sus deberes», dice. ¿Y qué razones podrían argumentar? Según esta misma fuente, «por considerar que va contra la Ley de Garantía de Unidad de Mercado, por restricciones injustificadas, por quiebra de principios de necesidad, proporcionalidad y no discriminación e infracción del artículo 18» sobre actuaciones que limitan la libertad de establecimiento y la libertad de circulación.

Mientras las críticas cruzadas entre taxistas y VTC crecen en Madrid, al igual que en otras comunidades autónomas, el Ministerio de Fomento ha convocado para el próximo martes, 19 de febrero, una nueva reunión del subgrupo de la Comisión de Directores Generales de Transportes de las comunidades autónomas constituido para analizar y tratar sobre la regulación del taxi y los VTC en los distintos territorios, informó hoy EP. Al parecer, la Junta de Andalucía había pedido una reunión con carácter urgente» para encontrar una solución coordinada a un conflicto complejo que «requiere altura de miras, responsabilidad y entendimiento». 

En Andalucía, donde gobiernan PP y Ciudadanos, muchas voces dan por hecho que el Gobierno andaluz planea repetir la estrategia de la Comunidad de Madrid, donde Garrido se ha negado a establecer una normativa que suponga la salida de empresas como Uber y Cabify, como ha ocurrido en Cataluña.

Fuente: Cinco Días