Decathlon hace autocrítica tras un año de retroceso en su negocio español. La cadena de ropa y artículos deportivos registró unas ventas de 1.898 millones de euros (con IVA) en el ejercicio 2018, un retroceso del 3% respecto al año anterior. Esto repercutió en su beneficio, que retrocedió a 96,6 millones, un 19% menos que en 2017. 

El director general de la compañía en España, Javier López, ha reconocido que «no son los resultados que nos hubiesen gustado», y ha reconocido «errores» en algunas de las iniciativas que Decathlon emprendió durante el año. Por ejemplo, la presentación de las diferentes líneas de productos en sus tiendas físicas, «más compleja que antes y que ha hecho más difícil encontrar los artículos que buscaban los clientes». Eso se tradujo en un tíquet medio más bajo, y también en un abandono pro parte de esos clientes que no hallaban aquello que iban a comprar. «La tienda supone el 93% de la facturación, así que es el algo que tenemos que cuidar. Ya hemos cambiado la disposición de las secciones para que sea más fácil e intuitiva», ha apuntado López.

El otro motivo al que achaca los peores resultados es el descenso en las campañas de comunicación, que ha supuesto un menor tráfico en tienda. «Hemos abierto tiendas en zonas como la calle Fuencarral de Madrid o en Ortega y Gasset, pero la gente no sabía qué tipo de tiendas eran», ha explicado López.

En cuanto a la caída un 19% del resultado neto, López también la atribuye a las inversiones realizadas durante el año pasado ligadas al proceso de transformación del grupo, y que ascendieron a 35 millones.

En el lado positivo está el avance de la venta online. Esta creció un 30% en el último año y ya genera el 6,5% de la facturación total de la empresa en España, algo más de 123 millones de euros. Decathlon está poniendo en marcha durante junio un servicio de entrega de pedidos a domicilio en dos horas, algo que ya ofrece en Valencia, Vigo y Tenerife, y que también llevara a Barcelona en julio. «La tienda sigue siendo un vector fundamental que tiene que reflejar las virtudes de un modelo integrado. Con la red de tiendas que tenemos, cosas como el click & collect, que permite recoger los pedidos online en una hora en tienda, es una gran oportunidad», ha detallado López. Decathlon ya ha instalado los chips RFID en el 100% de sus artículos, lo que le permitirá una gestión del stock actualizada.

El objetivo para 2019 es recuperar los crecimientos de los años anteriores, de entorno el 3% y el 5%, algo que López espera conseguir tras constatar un buen inicio de años. «Hay una tendencia buena, aunque crecer a doble dígito es díficil en un mercado tan maduro como el español», donde Decathlon opera desde hace más de 25 años.

Fuente: Cinco Días