Miembros del consejo de administración de WeWork, incluidos representantes Softbank, su mayor inversión, estarían maniobrando para decidir el cese del consejero delegado y fundador de la compañía de espacios de trabajo compartidos, Adam Neumann, según informa este domingo el diario The Wall Street Journal.

El consejo de la compañía tiene previsto reunirse esta semana, y en el orden del día podría incluirse una propuesta para nombrar a Neumann como presidente no ejecutivo. Estos movimientos tendrían su origen en la fallida salida a Bolsa de la firma, retrasada después de reducir su valoración de 42.700 millones de dólares a principios de año a 11.000. Unas dudas provocadas también por la nula rentabilidad de su negocio. La empresa ha perdido 810 millones de euros en su último año, y 3.000 en los últimos tres. El folleto de su salida a Bolsa no terminaba de aclarar la rentabilidad del modelo de negocio de alquilar grandes espacios de oficinas y realquilarlo, ya acondicionado, a empresas de menor tamaño y con mayor rotación.

Su modelo de gobierno corporativo también plantea dudas. El fundador, Adam Neumann, tiene preferencia en derechos de voto (sus acciones valen 20 veces más que las normales), y ha cerrado operaciones millonarias con la empresa, como venderle derechos intelectuales por varios millones de dólare. Además, la colocación en Bolsa estaba condicionada por una compleja estructura accionarial.

El retraso de la operación de salida a Bolsa impacta de forma directa en su financiación, ya que WeWork necesita captar 3.000 millones antes de fin de año para cumplir los términos de una refinanciación firmada por 6.000 millones. En caso de que no cumpla estas condiciones, necesitará fuentes alternativas de financiación.

Fuente: Cinco Días