Los sindicatos CCOO y UGT han coincidido hoy en criticar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) iniciado por el grupo DIA, y mientras el primero ha pedido directamente su retirada, el segundo ha revelado que la propuesta inicial incluye el cierre de 290 centros y 2.064 despidos.

Anuncios de los sindicatos en sendos comunicados tras la primera reunión mantenida con la compañía con motivo de este conflicto colectivo, que ha concluido con la constitución de la mesa negociadora del ERE.

Desde CCOO han solicitado que se retire este proyecto hasta que en la junta de accionistas de DIA del próximo 20 de marzo, los propietarios de la cadena decidan si apoyan el plan del consejo de administración -basado en una ampliación de capital de 600 millones de euros- o la opa lanzada por el magnate ruso Mijaíl Fridman.

«Con una junta de accionistas que en menos de un mes tendrá que decidir entre dos estrategias confrontadas de capitalización, no parece prudente sentarse a hablar sobre despidos o planes de viabilidad. De hecho, podría ser contraproducente», han defendido.

Los portavoces de CCOO han advertido de que «ni siquiera es descartable que la empresa entre en concurso de acreedores» -actualmente se encuentra en quiebra técnica-, por lo que abogan por la paralización del proceso.

No obstante, han apuntado que en la mesa negociadora se buscarán «soluciones que no pasen por la salida traumática de personal».

Los responsables de UGT, por su parte, han insistido en que el proyecto puesto encima de la mesa por el grupo de distribución supone el despido de 2.064 trabajadores -la compañía ya anunció que el número máximo de empleados afectados sería de 2.100- y el cierre de 287 tiendas de gestión
propia y 3 almacenes, ubicados en Manises (Valencia), Oviedo y San Antonio (Barcelona).

Según estas mismas fuentes, el ERE alcanza también a «personal del resto de los almacenes, de centros regionales y de la sede». Desde este sindicato han recordado que el comité intercentros de
DIA ya trasladó a la dirección de la firma su preocupación por el descenso de clientes y ventas en el pasado, y han exigido «responsabilidades por la mala gestión de la compañía a quien corresponda».

La próxima reunión está programada para el próximo 4 de marzo.

Fuente: Cinco Días