Enésimo episodio de la batalla de las autoridades europeas por las prácticas anticompetencia de los gigantes tecnológicos estadounidenses. La Comisión Europea ha anunciado hoy una multa de 997,4 millones de euros a Qualcomm, fabricante estadounidense de chips para teléfonos inteligentes. Qualcomm, líder mundial en ese segmento, firmó un acuerdo de exclusividad con Apple y pagó miles de millones al gigante tecnológico norteamericano para impedir la competencia efectiva en el mercado europeo. «Estos pagos no eran simples reducciones de precios, se hacían a condición de que Apple utilizara exclusivamente los chips de banda de base de Qualcomm en todos sus iPhones y iPads», ha asegurado la comisaria europea Margrethe Vestager, azote de las grandes empresas del sector en Estados Unidos.

Qualcomm se encarama a los primeros puestos del ránking de mayores multas impuestas por Bruselas, solo por detrás de Google (2.400 millones), Daimler (1.008 millones) e Intel (1.006 millones y precisamente una de las empresas perjudicadas en este caso).

El acuerdo que la Comisión considera ilegal se firmó en 2011, se renovó en 2013 y estuvo vigente hasta 2016. Durante la mayor parte de la duración del contrato estuvo en vigor una cláusula por la que Apple tendría que devolver lo abonado por Qualcomm –que controla el 90% del mercado– si en algún momento utilizaba a otros proveedores. La posición dominante en el mercado no es ilegal según las normas europeas, salvo que las empresas abusen de ella para restringir la competencia.

“Qualcomm echó a sus rivales del mercado de chips durante años. Y pagó miles de millones de dólares a un cliente clave, Apple, para que no pudiera comprar a sus rivales y usara sus chips en todos sus iPhone e iPad”, ha explicado Vestager ante la prensa.

Fuente: El País