Es un robot sin cabeza en un coche sin conductor. Ford está trabajando en una manera de resolver lo que los investigadores de la autoconducción llaman «el problema de los últimos 15 metros». Si un vehículo de entrega llega a su casa, sin ningún humano a bordo, ¿quién llevará el paquete, las bolsas de supermercado o la pizza caliente a su puerta? Un robot, por supuesto, podría estar a la altura de la tarea, sin necesidad de propinas.

En el caso de Ford, la solución es Digit, un androide con dos patas de cigüeña, brazos capaces de soportar una carga de 40 libras y un torso con cámara incrustada y un sensor de radar láser con forma de disco. Podría ser el primo sin cabeza de un droide de batalla de las precuelas de Star Wars.

El posible negocio para las entregas sin conductor es incluso más convincente que para los robotaxis, y potencialmente más fácil de ejecutar. Por un lado, no hay que preocuparse por la seguridad de los pasajeros humanos. Y el auge de las compras en línea ha convertido la entrega de paquetes en un área de gran crecimiento. Solo hay que ver a Amazon, que empleó 27.000 millones de dólares (24.000 millones de euros) en gastos de envío el año pasado.

Elimine al conductor humano de la ecuación, y los costos de entrega podrían desplomarse en un 60% o más. Los beneficios podrían ser de miles de millones.

Ford quisiera desplegar robots de entrega Digit desde 2021, junto con la introducción prevista de sus flotas de vehículos autónomos para transportar personas y paquetes durante todo el día. «Vamos a tener una flota de vehículos autónomos por ahí, y mi objetivo es lograr que los robots puedan estar allí y listos al mismo tiempo», asegura Craig Stephens, director de controles y automatización en investigación e ingeniería avanzada de Ford.

La forma en que los humanos reales reaccionen ante estos androides para entregas es una parte clave de la investigación de Ford, que se está iniciando e incluirá pruebas reales en las fábricas de Ford y en las aceras de Dearborn, Michigan y Pittsburgh. «En realidad, Digit me parece bastante amigable», afirma Stephens. La apariencia «inofensiva va a ser clave para que las personas puedan confiar en un robot».

Digit fue creado por Agility Robotics, una start up con menos de 30 empleados en Albany, Oregon. Su director de tecnología, Jonathan Hurst, afirma que no ha visto a nadie reaccionar negativamente cuando se reúne con Digit o un ancestro que carecía de un torso y era simplemente un par de patas en forma de pistón unidas a una sección media motorizada. Los robots han sido permitidos en la ciudad.

Si bien es probable que el diseño evolucione, Hurst no ve necesidad de ponerle cabeza al robot de entrega de Ford. De hecho, se pregunta si eso podría asustar más a la gente. «Si se ve muy parecido a un animal o un humano pero no lo es del todo, inmediatamente la gente se perturba», dijo Hurst. «Y no necesitamos físicamente una cabeza para nuestras necesidades de percepción actuales».

Otros están jugando con robots de entrega, y no todos son humanoides. Anybotics y el gigante alemán de autopartes Continental presentaron un concepto de perro robótico para entregas en el Consumer Electronics Show de este año. Segway ha mostrado un dispositivo de entrega móvil que parece una copiadora de oficina móvil, y FedEx está probando un bot de balanceo cuadrado que puede subir escaleras y llevar hasta 45 kilos. Los modelos de Starship Robots, que parecen soldados de asalto con seis ruedas, están desplegados en varias ciudades del mundo, según la start up con sede en San Francisco y Estonia. Y Postmates, que está investigando la entrega autónoma de comestibles con Ford, tiene un lindo robot de distribución conocido como Serve, con ojos saltones como Wall-E, de Pixar, junto con cuatro ruedas de gran tamaño.

A Ford le preocupa que los robots con ruedas queden bloqueados por los escalones del porche delantero que se encuentran fuera de la mayoría de los hogares en Estados Unidos. Digit, en comparación, puede subir escalones y levantar sus brazos para contener una caída. Sus diminutos pies, de suela de caucho corrugado, pueden caminar sobre hormigón, hierba, madera y grava.

La decisión de Ford de usar dos piernas, en lugar de ruedas, vino con la ayuda de investigadores de la Universidad de Michigan. «Nuestro mundo está diseñado para bípedos: nosotros», dice Stephens. «Así que hay un atractivo inherente a un robot bípedo».

Otra ventaja es el diseño ligero de Digit. En lugar de equiparlo con una gama completa de sensores y procesadores, que podrían subir su peso a más de 50 kilogramos, Digit obtiene la mayor parte de su poder de computación del vehículo autónomo de Ford. Los mismos sensores que permiten que un automóvil autónomo navegue se usarán para escanear el camino hacia la puerta y transmitir el camino hacia el robot.

Una vez que Digit deje el paquete en el porche o se lo entregue al destinatario, regresará a la furgoneta de reparto, se doblará en un cuadrado compacto y se deslizará en un cajón que sirve como estación de acoplamiento. El proceso parece sacado de una película de Transformers.

Para Ford, que se especializa en vehículos comerciales, la entrega sin conductor tiene un gran potencial. El fabricante de automóviles ha determinado el valor potencial del mercado para el transporte en automóvil y las entregas sin conductor en 332.000 millones de dólares (unos 300.000 millones de euros). «La oportunidad de negocio es grande», dice Stephens. «Los robots van a ser necesarios».

Fuente: Cinco Días