Apple reducirá a la mitad su objetivo de producción del iPhone X en el primer trimestre a alrededor de 20 millones de unidades, según publicó hoy el diario japonés Nikkei. El recorte, no confirmado por el gigante tecnológico, respondería a unas ventas del terminal más lentas de lo esperado en la campaña de Navidad en EE UU, China y Europa, según el citado diario. La información de Nikkei apunta a que Apple sí mantendrá el objetivo de producción de sus teléfonos iPhone 8, 8 Plus y iPhone 7, que alcanzarán las 30 millones de unidades. Las acciones de la compañía de la manzana caen a media sesión un 1,5%.
El recorte de producción parece, sin embargo, que no pasará factura en los resultados que Apple presentará este jueves referidos a su primer trimestre fiscal. Los analistas prevén que la firma cierre este periodo -el que más ingresos le reporta y el primero que contabiliza las ventas del iPhone X- con un beneficio neto récord superior a los 19.000 millones de dólares (15.315 millones de euros), una cifra que superaría los 18.361 millones alcanzados entre octubre y diciembre de 2015, el trimestre más rentable de la compañía, informó ayer Financial Times.
Pese a ello, los analistas de UBS advierten que las ganancias de Apple para marzo sí podrían decepcionar levemente, pues pese al buen rendimiento del iPhone X, «sus ventas han estado ligeramente por debajo de las expectativas de la industria», según el analista de Canalys Ben Stanton. En este contexto, también habría que tener en cuenta que los usuarios están renovando cada vez más tarde sus teléfonos móviles, tal y como advierten múltiples fuentes del sector.
Los analistas de UBS han añadido que las últimas encuestan revelan que el porcentaje de personas que planea adquirir un iPhone X ha caído del 43% al 37%, informó Reuters. Esta agencia cuenta también que el analista especializado en Apple Ming-Chi Kuo, de KGI Securities, ha asegurado que el iPhone X se renovará este año con tres nuevos modelos.
Según apunta Kuo, la compañía estaría preparando dos modelos con pantallas OLED de 5,8 y 6,5 pulgadas y un tercer modelo con pantalla LCD de 6,1 pulgadas. Las tres opciones carecerían de marcos y contarían con un diseño cercano al actual iPhone X. Kuo señaló que la baja demanda del iPhone X se debe principalmente al alto precio (1.159 euros) del dispositivo, con lo que la apuesta por un modelo con pantalla de 6,1 pulgadas pero con tecnología LCD puede ser un gancho para aquellos clientes que no están tan dispuestos a invertir tanto en un smartphone.
Para el analista de Canalys, el rendimiento del iPhone X ha sido “impresionante” para un dispositivo con un precio tan alto. Esta empresa de análisis de mercado asegura que de los 81 millones de iPhones que Apple habría vendido en el último trimestre del año, 29 millones han sido iPhone X.
Fuente: Cinco Días