
Amazon empezará a colocar a los nuevos clientes de alimentación en una lista de espera y reducirá las horas de compra en algunas tiendas Whole Foods. El gigante del comercio electrónico adopta esta decisión para priorizar los pedidos de los clientes actuales que compren productos comestibles en línea durante la crisis sanitaria del Covid-19.
«Aunque hemos aumentado la capacidad de pedidos en más del 60% debido al Covid-19, todavía esperamos que la combinación de capacidad restringida debido al distanciamiento social y la demanda de los clientes sigan haciendo que encontrar ventanas de entrega disponibles sea un reto para los clientes», ha explicado la firma en un comunicado.
Muchos compradores que últimamente querían comprar productos de alimentación a través de la plataforma de Amazon fueron incapaces de realizar sus pedidos por la falta de franjas horarias de entrega disponibles.Ante la situación, la empresa de Jeff Bezos tuvo que reconocer que relegará a los nuevos clientes a una lista de espera desde hoy lunes mientras trabaja en restaurar la disponibilidad de la entrega.
La presión de demanda ha llegado a tal punto que Stephanie Landry, vicepresidenta de compras de Amazon, expresó a través de un blog habilitado por la firma para el seguimiento del Covid-19: «Si son capaces de hacerlo con seguridad, de nuestros clientes animamos a los que puedan a que compren en persona».
En las últimas semanas, el gigante del ecommerce incrementó el número de tiendas de la cadena Whole Foods, de la que es propietaria, que disponían de un servicio de recogida: éstas han pasado de 80 locales con esta modalidad de compra a 150. Amazon también estudia reducir las horas de apertura en algunas tiendas de Whole Foods para facilitar a sus empleados puedan preparar con más celeridad los pedidos de comestibels en línea, explicó la compañía.
Las medidas ilustran cómo el mayor minorista en línea del mundo, que demostró su ambición de entrar en la industria de los comestibles cuando adquirió Whole Foods por 13.700 millones de dólares en 2017, aprovecha ahora su presencia —tanto online como en las tiendas físicas— para hacer frente a la gran demanda de los consumidores en cuarentena.
Amazon ofrece servicios de entrega de comestibles, llamados Amazon Fresh y Amazon Prime Now, desde sus propios almacenes y tiendas Whole Foods. Ofrece una entrega rápida, de apenas unas horas. El mes pasado, Amazon suspendió temporalmente el servicio de entrega de la despensa Prime, que vende comestibles no perecederos.
La empresa asegura que está contratando más trabajadores para ampliar la capacidad y que planea lanzar una nueva característica que ayudará a los clientes a asegurar un «puesto en la fila» virtual para distribuir los espacios de entrega por orden de llegada. También ha ofrecido una mayor remuneración para alentar a los trabajadores del almacén a trabajar en su servicio de entrega de comestibles.
Actualmente, Amazon tiene 487 tiendas Whole Foods en los Estados Unidos. Estas tiendas han estado limitando el número de clientes permitidos a la vez, y Amazon ha dicho que realiza controles diarios de la temperatura de los empleados y envía máscaras y guantes para proteger a los trabajadores.
Aún así, algunos empleados de los almacenes Whole Foods y Amazon han protestado porque la empresa no está haciendo lo suficiente para protegerlos. Más de 50 centros de Amazon y varios almacenes de Whole Foods han confirmado casos de coronavirus, según múltiples informes.
Fuente: Cinco Días