Las caras que aparecen en la imagen superior representan a seres humanos que no existen. Los algoritmos que las han creado han sido entrenados con miles de imágenes y han desarrollado sus propios prototipos con tal nivel de detalle que resulta casi imposible decir si es una fotografía real o creada por la inteligencia artificial. Hay distintos proyectos que están trabajando en el desarrollo de este tipo de contenido, con la intención de crear personajes híper realistas en los videojuegos y en las películas con efectos especiales. «Este enfoque podría inventar texturas y personajes realistas a demanda», explica el MIT. También se pueden usar para mejorar los vídeos con mala calidad de imagen.

Uno de los más recientes es la investigación publicada por la Universidad de Cornell (Nueva York) el año pasado, donde los investigadores explican cómo crearon una red generativa antagónica (GAN) para conseguir estas imágenes. Estas redes se utilizan en el aprendizaje no supervisado en el que dos redes neuronales se entrenan la una a la otra. Así es como funciona: una de las redes genera las imágenes nuevas y la otra intenta diferenciar entre las imágenes originales y las creadas de forma artificial por la otra red. Cuando esta segunda red es incapaz de diferenciarlas, se asume que los humanos tampoco serán capaces de encontrar la diferencia.

¿Tú sabrías decir si las siguientes fotografías representan a una persona real o a una creada por un algoritmo? Pincha en la siguiente imagen para probar:

Fuente: El País