Nadie puede negar que Sisco Sapena, consejero delegado de Lleida.net, es un pionero. En 1995, cuando para la mayoría de las familias españolas hablar de Internet les remitía a una película de ciencia ficción fundó esta compañía basada en prestar servicios de acceso a la red de redes. En 2015, con el escándalo de Gowex aún en el ambiente, se decidió a salir a Bolsa en el MAB. Y en el pasado mes de diciembre se convirtió en la primera empresa española que cotiza tanto en el mercado alternativo bursátil español como en el que ofrece Euronext tras realizar un dual listing.

¿Por qué han decidido empezar a cotizar en Euronext?

Hay una razón muy importante. El 56% de los ingresos de Lleida.net procede de fuera de España, operamos en 24 mercados, tenemos filiales en 12 y no nos queremos restringir a un solo mercado bursátil. Por otro lado, cuando estás cotizado eres alcanzable, pero no significa que seas visible. Nosotros ya tenemos inversores ingleses, franceses, japoneses o brasileños, pero lo que queremos es ganar un poco más de visibilidad. Además, y como cotizamos en el segmento de fixing, pasaremos de contar con dos subastas a cuatro. Nuestras acciones se negociarán cuatro veces al día: a las 11.30 y a las 16.30 en Euronext y a las 12.00 y a las 16.00 en el MAB. Por tanto, otro de nuestros objetivos es ampliar la base de accionistas.

¿Es realmente rentable para una pequeña empresa asumir los costes derivados de un salto a Euronext cuando ya se cotiza en el MAB?

En el momento en que haces un dual listing aprovechas los pasos que has dado ya para cotizar en el otro mercado. Es más una amortización del gasto que ya estamos teniendo. El coste de esta operación es de unos 70.000 euros. En comparación, nuestra forma de promoción habitual es a través de ferias comerciales, en las que gastamos entre 10.000 y 250.000 euros. Lo podemos hacer porque la situación de la compañía es mucho mejor. Hemos aprendido y el MAB ha sido muy buena escuela para nosotros. Ya llevamos muchos trimestres con ebitda positivo y generando caja. Los números nos permiten hacer esta operación. Y, en todo caso, esto lo decidirán nuestros accionistas o el mercado.

¿Se les ha quedado pequeño el MAB?

No utilizaría esa expresión. El MAB es una plataforma para empresas españolas que operan en el mercado español. Pero una empresa con vocación internacional, lo que tiene que hacer es buscar inversores en otros mercados. Y una forma muy barata de darte a conocer es cotizar en un mercado. Es un altavoz que las empresas hemos de aprovechar. Siempre hay un proceso de aprendizaje, pero es algo que te abre un abanico de oportunidades que te da el mercado. En Euronext hay inversores más especializados en nuestros temas. En España apenas hay fondos orientados a mercados alternativos.

¿Valoran saltar al Mercado Continuo?

Ya veremos. El listón está muy alto, entre los 250 y los 300 millones de capitalización durante seis meses. Si vamos creciendo, nos lo plantearemos.

¿Y acometer una ampliación de capital en España o en Francia?

De momento necesitamos un perido de funcionamiento en Euronext. Si aparecen oportunidades de crecimiento inorgánico ya pensaremos en qué mercado pediremos dinero para ello sin excluir a la Bolsa española. Por el momento, vemos oportunidades, pero primero queremos darnos a conocer. La cotización en Euronext es para impulsar a la propia compañía, no a la financiación de la compañía. Es una oportunidad para dar a conocer nuestros productos. Cuando ya hayamos alcanzado un nivel de venta de producto suficiente, platearemos estas cosas.

¿Estudian repetir la operación con Euronext en otros mercados y cotizar en más Bolsas extranjeras?

Siempre digo que no pararé hasta llegar al quinto mercado. No me atrevo a aventurar en cuanto tiempo, siempre dependerá del timing de la compañía. Además de Madrid y Euronext, estudiamos cotizar también en las Bolsas de Bombay y Australia y no descartamos alguna Bolsa estadounidense, pero no tiene por qué ser el Nasdaq.

¿Por qué planean viajar a mercados tan lejanos y exóticos?

Concretamente pensamos en el mercado australiano porque tiene una característica peculiar. Los fondos de pensiones del país tienen la obligación de invertir cada trimestre un porcentaje significativo en cotizadas australianas. Eso hace que los múltiplos de cotización de las empresas que están en esta Bolsa sean más elevados que los extranjeros. La media en el MAB es en torno a dos veces facturación. En el Nasdaq está en torno a cuatro veces. Y en Australia llega hasta las ocho, diez o incluso 12 veces. Es un mercado donde no hay tanta oferta de acciones , pero existe una alta demanda impulsada por los fondos de pensiones. Es algo que ocurre también en otras Bolsas como la de Bombay. En el fondo lo que queremos es ir a países y zonas con mucha población. Tenemos muchas posibilidades de tener crecimientos elevados en mercados con muchos millones de habitantes.

¿Han hablado ya con los reguladores de estos mercados sobre cuál es el proceso?

Aún no. Hemos hablado con asesores y con gente que ya cotiza allí, pero tenemos un horizonte lejano. Dependerá de las circunstancias de cada país y de cada mercado. En algunos casos, por ejemplo, no tiene que estar cotizando la matriz y sí la filial. Se analizará en su caso las posibilidades y veremos. Lo importante es no cerrarse a las oportunidades.

Fuente: Cinco Días