La junta directiva de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) ha aprobado la salida de Mario Armero como vicepresidente ejecutivo de la organización después de casi ocho años en el cargo, según ha anunciado la propia organización. Aún no se conoce el nombre del sustituto, que se incorporará después de que Armero deje de ejercer sus funciones a finales de año, para «garantizar una sucesión ordenada».

La salida de Armero se produce por iniciativa propia «para darle un nuevo rumbo a su carrera laboral», afirma la nota de Anfac, y fue aprobada en la junta directiva celebrada este jueves. Armero accedió en 2012 al cargo de vicepresidente ejecutivo, una nueva figura creada ad hoc tras la salida de Luis Valero como director general.

En la nota, el presidente de la patronal automovilística resalta que en sus ocho años al frente de Anfac, Armero «ha conseguido modernizar la asociación y situarla como una de las principales organizaciones empresariales de España, una posición inestimable para velar por los intereses de la industria de la automoción española y de sus 17 fábricas». Igualmente, reconoce su papel en las negociaciones con las diferentes administraciones, que «permitieron a la industria recuperar su peso específico tras la crisis y mantener su liderazgo europeo».

En este sentido, la asociación le reconoce especialmente que, gracias a su capacidad de interlocución y negociación, la industria automovilística española, que había perdido la mitad de la producción durante la crisis, se recuperara gracias al Plan Tres Millones, «una apuesta y compromiso industria-Gobierno-sociedad» con el que España volvió a estar entre los 10 primeros fabricantes mundiales. Anfac le apunta haber conseguido la aprobación de planes de renovación del parque móvil y estímulo a la compra de vehículos alternativos, así como su contribución a homogeneizar las políticas de movilidad en las distintas regiones o a diseñar una «hoja de ruta integral hacia la descarbonización del transporte».

La Junta directiva reconoce la «defensa a ultranza» que Armero ha hecho durante su mandato de los intereses del sector y el crecimiento de Anfac, a la que se han incorporado 20 nuevos asociados durante su etapa como vicepresidente.

Planes PIVE

En este período al frente de la organización de fabricantes de automóviles en España, Armero ha trabajado en la consecución de diferentes planes de ayuda por parte del Gobierno. Así, pocos meses después de su llegada a Anfac (septiembre de 2012), se lanzó el primero de los planes PIVE, de ayuda a la compra de vehículos nuevos a cambio de achatarrar uno antiguo.

Este programa, que llegó en un momento muy complicado para el sector del automóvil en España, con bajos volúmenes de matriculaciones, vino acompañado de siete ediciones más, a medida que se fueron agotando los fondos.

Durante su mandato, las matriculaciones de turismos y todoterrenos en España pasaron de poco más de 808.000 unidades al cierre de 2011 a 1,32 millones de unidades en 2018, lo que supone una mejoría de más del 60%, mientras que las plantas instaladas en España pasaron de ensamblar 2,35 millones de vehículos en 2011 a 2,81 millones de unidades en 2018 (+20%).

Durante su período en Anfac, Armero también ha trabajado con los diferentes gobiernos en la puesta en marcha de planes de impulso a la movilidad eléctrica y eficiente (Moves, Movea, VEA o Movalt). También defendió la prórroga en la aplicación del ciclo de emisiones WLTP, la creación de una fiscalidad ‘verde’ del automóvil vinculada al uso y no a la compra y un plan estructural a largo plazo para proteger a un sector de gran importancia para la economía española.

Fuente: El País