En España hay 1.700 fondos de inversión, 2.500 planes de pensiones y 2.700 sociedades de inversión de capital variable (sicav). Más del 95% de todos estos vehículos va a acabar 2018 con pérdidas. Entre los pocos que tendrán rentabilidad positiva hay uno que destaca sobre el resto. Se trata de Smart Social Sicav. Está gestionado por un amateur y ha logrado una rentabilidad anual del 15,2% gracias a apostar por que las Bolsas caerían con fuerza.

El encargado de decidir dónde invertir los 30 millones del patrimonio de la sicav es Antoni Fernández Serrano. Se trata de un gestor autodidacta, sin ninguna formación reglada en temas financieros, pero “con más de 40.000 horas de seguimiento de los mercados financieros”, según explica.

Cada mañana a las ocho enciende su ordenador, en un pueblo cercano a Vic (Barcelona), para ver la evolución de las Bolsas asiáticas. A las nueve de la mañana ya está operando, en completa soledad, hasta que termina su jornada a las 10 de la noche.

“Mi despacho está casi en medio del bosque. Creo que es necesario para aislarse del barullo y del ruido diario de los mercados; la concentración es primordial”, comenta Fernández.

Abierta a todos los públicos

Cotizada en el MAB. Smart Social Sicav es la sicav con mayor número de accionistas de España y una de las pocas que mantiene el espíritu original de este producto de inversión. Al tener más de 500 accionistas es fácil comprar sus acciones, que cotizan en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB), una plataforma de negociación propiedad de Bolsas y Mercados Españoles (BME).

Compra desde un banco. Las acciones de Smart Social Sicav se puede contratar desde cualquiera de los grandes bancos, así como desde Deutsche Bank, Andbank, Inversis y desde las gestoras como Tressis, Ahorro Corporación, Renta 4. Los interesados tienen que dar el número de identificación de las acciones, disponibles en la página web del firma: bolsacom.com. Se puede contratar desde el precio de una acción, que ahora está en 7,4 euros.

El éxito de esta sicav no es flor de un día. Desde que se lanzó el 5 de mayo de 2015 ha logrado una rentabilidad agregada del 24,3%. Su gestación tuvo lugar al margen de los grandes despachos de la banca y las gestoras de activos. Un grupo de aficionados a la inversión decidió crear un concurso llamado Incubadora de Gestores, para encontrar al mejor gestor amateur. Se presentaron 40 personas, y se fue monitorizando sus decisiones de inversión durante dos años.

El salto de un concurso de aficionados a un proyecto real se produjo cuando el organizador, José Sánchez Molero, se comprometió a aportar 100.000 euros para que el gestor ganador pudiera demostrar sus capacidades en el mercado real. Molero logró convencer a 500 personas para que pusieran dinero y crear una sicav, que arrancó con un capital de 2,4 millones.

Antoni Fernández ganó el concurso y, de paso, logró un trabajo como gestor. La sociedad gestora de la sicav es Inversis Banco y tiene delegado el mandato de gestión en la sociedad de valores GPM que, a su vez, contrató a Fernández como gestor de la sicav.

José Sánchez Molero se convirtió en presidente de Smart Social Sicav, que ahora tiene 900 pequeños accionistas, pero no percibe ninguna remuneración. “He impulsado este proyecto porque creo en él. Hemos demostrado que podemos ofrecer rendimientos por encima de la inmensa mayoría de gestoras. Mi deseo es que la sicav mantenga su espíritu originario y que atraiga a más pequeños inversores. Las sicav no tienen por qué ser un vehículo para millonarios”, explica Molero.

La clave para conseguir un 15,2% de rentabilidad cuando se han desplomado las Bolsas de Estados Unidos, Europa y Japón ha sido la toma de posiciones cortas. Con la utilización de derivados financieros, como opciones futuras sobre el Dax, el Nasdaq o el Ibex 35, Fernández apostó por la caída de estos mercados.

Durante el ejercicio 2017 ya mantenía esta tesis de inversión, pero fue un año donde las Bolsas fueron bastante bien y hubo poca volatilidad. El valor de Smart Social Sicav cayó y arreciaron las críticas. En cambio, en 2018, la fuerte corrección que Fernández llevaba varios trimestres esperando ha llegado en toda su magnitud.

“Como los índices han caído hasta los niveles que esperaba Toni, ha decidido replegar las inversiones y ahora mantenemos el 80% de la cartera en liquidez, a la espera de qué inversiones tomar para 2019”, apunta Molero.

Pese al notable éxito de la sicav, Molero y Fernández no harán niguna celebración. “Casi nunca vamos a eventos, charlas o cursos”, apunta el gestor. “Y no vamos ha hacer nada en especial por los resultados de este año, solo trabajar para mantenerlos el año que viene”.

Fuente: El País