En toda la discusión sobre lo que salió mal en Kraft Heinz, un lugar en el que vale la pena centrarse es en el consejo. Los consejeros que supervisan el productor de ketchup y quesos, cuyas acciones han caído un 31% desde el profit warning del 21 de febrero, podrían haber ayudado a la compañía a evitar su actual bache estratégico si hubieran tenido una mayor experiencia y menos demandas de tiempo por otros lados.

El consejo de 11 personas de Kraft Heinz sí cumple dos cosas. Representa a los mayores accionistas de la compañía: el grupo de inversión brasileño 3G Capital y Berkshire Hathaway, de Warren Buffett, aproximadamente en proporción a su participación conjunta del 49%.

Tampoco hay escasez de experiencia en bienes de consumo: los consejeros han trabajado para empresas como PepsiCo, Nike, Walmart y otras propiedades de 3G como Anheuser-Busch InBev y Burger King.

Pero en comparación con sus rivales, a Kraft Heinz le faltan cosas.Coca-Cola, el gigante de las bebidas de 195.000 millones de dólares, ha elegido consejeros con cargos de responsabilidad en algunas de las mayores compañías financieras del mundo, por ejemplo –entre ellas la presidenta de Santander, Ana Botín–, junto con ejecutivos de los juegos de azar, la computación en la nube y la filantropía, entre otras industrias.

La suiza Nestlé cuenta con luminarias del lujo, el petróleo y el gas, los seguros y una exsecretaria de agricultura de Estados Unidos, Ann Veneman. En los últimos tres años, ambas empresas han obtenido mejores beneficios para sus accionistas que Kraft Heinz.

Los miembros del consejo de administración de Kraft Heinz, además, están muy dispersos. Todos menos dos forman parte de otros tres o más consejos; cuatro de ellos ocupan cargos directivos en cuatro o más empresas.

Eso podría no ser un problema en un negocio donde todo va bien. Pero Kraft Heinz, que ha decepcionado mucho a los accionistas, necesita un consejo que pueda dedicar el tiempo y los recursos necesarios para mantener controlados al consejero delegado Bernardo Hees y su equipo. Junto al profit warning, el 21 de febrero la empresa reconoció que la SEC la había citado por algunas de sus políticas contables, así como un saneamiento de fondo de comercio por valor de 15.400 millones de dólares.

Dado que Berkshire Hathaway y 3G poseen casi la mitad de la empresa, es poco probable que quieran reemplazar a sus propios consejeros, y otros inversores no pueden obligarles a hacerlo. Pero eso no significa que no haya margen para el cambio.

El consejo de administración de Kraft Heinz solo tiene 11 miembros, mientras que Nestlé, Kellogg, Mondelez, Pepsi y Coke tienen más de 13. Eso significa que hay espacio para que el fabricante del queso Velveeta añada un par más. Tener enfoques frescos no puede ser más que una ayuda.

Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías

Fuente: Cinco Días