Revolución en el mercado inmobiliario español. La oferta pública de adquisición lanzada el lunes por la mañana por Colonial para controlar el 100% de la socimi Axiare, de la que controlaba el 13,3% hasta el pasado viernes, va a dejar el sector de las socimis marcado por dos grandes jugadores.

La inversión en este vehículo de inversión, dirigido a personas físicas y jurídicas que tengan por objeto promover o comprar inmuebles para alquilar, estaba hasta ahora dominada por Merlin Properties, el gigante creado de la nada por Ismael Clemente, ya que era la única sociedad española que superaba los 10.000 millones en activos. Si finalmente la operación sale adelante, Colonial peleará con Merlin, cuyos principales accionistas son Santander (22,27%) y BBVA (6,44%), ya que con la adquisición de Axiare pasaría a tener un portfolio con activos por valor de 10.000 millones de euros, tal y como remarca la sociedad en el comunidado en el que hacía oficial la OPA.

De esta manera entraría a pujar, al igual que Merlin, por entrar en el top 10 de las inmobililarias europeas, en el que el mínimo para entrar se sitúa en torno a los 12.000 millones en activos. Es la actual cartera de las dos sociedades británicas que ocupan la novena y la décima posición: Intu, con 11.800 millones, y Hammerson, con 11.715 millones.

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Lejos quedarían el resto de grandes socimis en España. En la clasificación por activos en tercer lugar aparecería Hispania, con propiedades por valor de 4.300 millones de euros. La cartera de inmuebles de esta sociedad difiere mucho con respecto a la de Merlin Properties, diversificada en oficinas (236.089 metros cuadrados), logística (183.121) y centros comerciales (71.587) por orden de importancia, y la de nueva Colonial, que dispondría de unos activos por 10.000 millones, de los que la joya de la corona serían los edificios de oficinas en Madrid, con un valor de 2.600 millones.

En el caso de Hispania, la principal fortaleza es el hecho de haberse convertido en el mayor propietario de hoteles de España, con 39 inmuebles y un total de 11.200 habitaciones. A la parte central del negocio le suma 25 edificios de oficinas con una superficie total de más de 153.000 metros cuadrados , un solar donde se construirán dos edificios adicionales con más de 33.000 metros y cinco edificios residenciales que contienen 730 viviendas.

La siguiente en la clasificación sería Axiare, con activos por valor de 1.700 millones, que quedarían integrados en la nueva Colonial si prospera la OPA. A continuación aparece Lar España, con activos por valor de 1.419 millones. En la actualidad, esta sociedad cuenta con 30 activos inmobiliarios, de los que una gran mayoría corresponden a centros comerciales. En concreto dispone de este tipo de construcciones en Madrid, Toledo, Baleares, La Rioja, Vigo, Valencia, Sevilla, Alicante, Cantabria, Lugo, León, Vizcaya, Navarra, Guipúzcoa, Palencia, Albacete y Barcelona. Todos ellos suman un valor de 1.040 millones, lo que supone un 72,3% del total de la cartera de Lar España. El resto de portflolio lo completan tres edificios de oficinas, por un importe de 149,8 millones, cuatro activos ligados a la logística por 83,3 millones a cuatro activos logísticos y 145,4 millones a cuatro promociones en desarrollo.La clasificación la cerraría GMP, con 1.181 millones en activos y centrado también en el mercado de oficinas. En la actualidad posee 27 inmuebles en propiedad, con una superficie superior al medio millón de metros cuadrados, a lo que suma 4.876 plazas de parking.

Promotoras de nuevo cuño

Junto a las socimis, el mercado inmobiliario en España está también controlado, aunque en menor proporción, por las inmobiliarias que lograron pasar el corte de la crisis y que ahora cotizan en el mercado continuo, aunque con un negocio sensiblemente inferior al registrado antes de la crisis. Entre ellas se encuentran Aedas Home, San José, Inmobiliaria del Sur, Montebalito, Quabit, Renta Corporación o Urbas. Estas ocupan una parte importante del mercado, aunque han sido desplazadas poco a poco por las promotoras de nuevo cuño, en las que los fondos internacionales han adquirido un peso fundamental con una premisa: la recuperación completa del mercado inmobililario.

La visionaria fue Neinor Homes, que fue la primera en lanzarse a cotizar con una OPV en marzo de 2017. Con ese movimiento, el fondo texano Lone Star, en ese momento único accionista de la inmobiliaria, colocó el 60% de la compañía entonces valorada en 1.100 millones, anticipándose a los competidores. La propuesta de la compañía es construir 4.000 viviendas al año.

La segunda en llegar ha sido Aedas, del fondo estadounidense CastleLake. La intención del accionista es quedarse con un paquete mínimo de acciones que recuperando las inversiones realizadas en los últimos años fundamentalmente en suelos. La tercera será Vía Celere, propieda de Värde Partners.

Fuente: El País