Juan Carlos Escotet dejará temporalmente la presidencia del Consejo de Administración de Abanca para «atender y apoyar a los equipos de sus empresas sitas en Venezuela», según ha comunicado la entidad gallega a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El cargo será ocupado por el presidente de la Comisión de Nombramientos del Consejo de Administración de Abanca, Eduardo Eraña Guerra.

El comunicado se ha producido poco después de conocerse que las autoridades de Venezuela han detenido a 11 gerentes del banco Banesco Banco Universal, también presidido por Escotet. Entre ellos se encuentran el presidente ejecutivo de la entidad, Oscar Doval, así como el consultor jurídico Marco Ortega, el vicepresidente Jesús Irauskin, la oficial de cumplimiento (encargada de gestionar los productos financieros) Teresa de Prisco Pasacale, y la directora del banco, Liz Sánchez de Rojas..

Fuentes de Banesco han informado a Efe de que hay algún ciudadano español entre los detenidos, sin especificar su identidad.

El fiscal general de Venezuela, Tarek Saab, ha pedido «tranquilidad» a los clientes de la institución financiera, quienes, aseguró, no se verán afectados por la medida, pues precisó que se trata de un hecho «muy quirúrgico», que pretende «solamente solventar, solucionar una acción delictiva al margen de la ley». 

También indicó que a quienes siguen esta investigación, enmarcada en la operación «Manos de Papel» contra supuestas mafias financieras, les ha llamado la atención que «el 90 % de las cuentas asociadas a estas actividades ilícitas que han buscado socavar el sistema económico nacional pertenecen a Banesco». Dijo que «es obvio» que la junta directiva de Banesco tendrá que prestar declaración y que «en función de su cooperación» podrían dictarse contra sus miembros medidas «de carácter cautelar». 

«Nosotros hemos visto que de entrada se ha podido determinar la presunta responsabilidad de los integrantes de esta alta gerencia de Banesco en una serie de irregularidades que facilitó o encubrió, los ataques contra la moneda venezolana, porque el objetivo final ha sido demoler, diluir, destruir la moneda venezolana a través de la extracción del papel moneda y la especulación cambiaria», afirmó Saab.

Fuente: Cinco Días