El juez que instruye el caso Villarejo, Manuel García-Castellón, ha acordado imponer una fianza de 300.000 euros al antiguo jefe de Seguridad de BBVA, Julio Corrochano. El juez ha adoptado esta decisión a petición de la Fiscalía Anticorrupción. Corrochano estaba citado a declarar este viernes en la Audiencia Nacional por presuntos delitos de cohecho activo y revelación de secretos. Ha acudido pero se ha acogido a su derecho a no declarar. El juez le ha dado 15 días para abonar la fianza. Si no lo hace, ingresará en prisión.

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Ocho directivos del BBVA —de los que cuatro son empleados actuales y dos siguen vinculados a la entidad— han pasado entre este jueves y el viernes por una sala de vistas de la Audiencia Nacional como imputados en una pieza separada del conocido como caso Villarejo, que investiga las actividades presuntamente ilícitas del comisario jubilado.

Según han revelado varias grabaciones incorporadas a la causa, Corrochano, que antes de ser el máximo responsable de la seguridad del BBVA fue jefe Superior de Policía de Madrid y comisario general de Policía Judicial, fue presuntamente el encargado de contratar a Villarejo para realizar diversos trabajos para el BBVA. Se investiga si los servicios del policía, que se encuentra en prisión provisional por este caso, incluyeron escuchas ilegales a empresarios, políticos y periodistas.

Este viernes también estaban citados Inés Díaz Ochagavia, que sustituyó a Corrochano como directora de Seguridad Corporativa, y Nazario Campo Campuzano, miembro del equipo de Seguridad, quienes se han acogido a su derecho a no declarar. El jueves hicieron lo mismo otros directivos del BBVA.

El socio y abogado de Villarejo, Rafael Redondo, sí ha prestado declaración.

El juez tuvo que aplazar este jueves la declaración de Ángel Cano, ex consejero delegado de BBVA, en la Audiencia Nacional ante la incomparecencia de este, que alegó encontrarse de viaje en el extranjero. Ha sido citado de nuevo el próximo día 11. Un día antes García-Castellón se desplazará con los dos fiscales anticorrupción a la cárcel de Estremera (Madrid) para tomar declaración a Villarejo. 

Fuente: El País