Sorpresa en la sala donde se juzga la mayor operación crediticia que emprendió el Banco de Valencia. El ex consejero delegado de la entidad, Domingo Parra, ha reconocido este martes ante la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional que el crédito que dejó un agujero de más de 93 millones de euros en las cuentas se concedió sin análisis previo de viabilidad y manipulando los procedimientos internos para favorecer a un tercero. El tribunal le juzga por un delito de administración desleal en la concesión de 312 millones de euros al grupo del empresario Bautista Soler para la compra de una participación en Metrovacesa.

Parra fue condenado en abril pasado a cuatro años de prisión por un delito continuado de administración desleal en varias macrooperaciones urbanísticas financiadas por la entidad que causaron un perjuicio de 198 millones de euros. Parra y otro exdirectivo, Alfonso Monferrer, debían indemnizar a CaixaBank con 168 millones de euros. Unos meses antes, en febrero, la Audiencia Nacional había condenado también a Parra a un año y siete meses de cárcel por un delito continuado de administración desleal por haber actuado contra los intereses de la entidad al conceder un préstamo a una empresa con la que él mismo y su mujer, ya fallecida, tenían relación. 

En este último caso, en el que Parra autorizó unilateralmente el préstamo a la sociedad Pegoliva SL para la construcción de viviendas (dinero que nunca se recuperó), el ex consejero delegado también admitió los hechos. Este martes Parra ha declarado brevemente ante el tribunal y ha reconocido que son ciertas las acusaciones tanto de la Fiscalía como del FROB al asegurar que fue responsable de una operación crediticia de 312 millones en favor del Grupo Soler para que la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) pudiera adquirir una participación del 2,4% en Metrovacesa.

El juicio por esta operación crediticia, en la que la Fiscalía Anticorrupción cree que Parra manipuló los procedimientos internos del banco para favorecer a las empresas de Soler, empezó este lunes y se prevé que termine el próximo viernes. El crédito se concedió el mismo año en el que la familia Sanahuja, primer accionista de Metrovacesa, lanzó una OPA de acciones sobre el 100% del capital de la inmobiliaria para resolver el enfrentamiento con los socios Joaquín Rivero (fallecido) y Bautista Soler. Los créditos que Parra concedió a las empresas de Soler fueron refinanciados varias veces.

Según la Agencia EFE, Parra ha reconocido los hechos después de que efectuara en la víspera un ingreso de 100.000 euros en la cuenta del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), personado en la causa como acusación.

Fuente: El País