El coste laboral por hora trabajada mostró un repunte a finales del año pasado. En el último trimestre creció un 1,6%, según el índice de coste laboral armonizado que elabora el INE. Supera el aumento de finales de 2016, no así el de 2015. Lo mismo sucede cuando los datos se depuran de los efectos estacionales, en ese caso el incremento fue del 1,2%.

En los últimos tiempos, los salarios han tenido crecimientos muy débiles en las diferentes estadísticas salariales. La que arrojaba aumentos más altos es la de convenios, que apenas muestra una subida que no llega al 1,5%. El índice publicado por el INE, un dato que parte de la encuesta trimestral de coste laboral y se depura para hacerlo homogéneo con los números de Eurostat, muestran una cierta revitalización: la cifra desestacionalizada no superaban incremento del 1% desde hacía dos años, pese al vigor que está mostrando la creación de empleo.

El índice de coste laboral no mide los costes laborales en euros sino que los sintetiza en un dato que tiene su base 100 en el año 2012 que mide su evolución por hora efectiva trabajada. De ahí que al divulgarse no se facilite un dato monetario, eso número se conoce unas semanas después cuando el INE publica la encuesta trimestral de coste laboral.

La cifra que facilita el INE en su comunicado atañe al conjunto del coste laboral (salario, cotizaciones sociales y otro tipo de remuneraciones no monetarias). Si solo se toma en cuenta el salario, el aumento se reduce en dos décimas, hasta el 1,4%. No obstante, comparándolo solo con los últimos trimestres del año vuelve a ser el cuarto de 2015 el que tuvo un mayor crecimiento.

Por ramas de actividad, los costes laborales que han mostrado un mayor vigor entre octubre y diciembre se sitúan en el 4,9% en el sector de información y comunicaciones y en el 4,3% en las finanzas y los seguros. Lejos de ellas se sitúan los profesionales, los técnicos y los científicos cuyas remuneraciones crecieron un 3%.

Los descensos solo se dan en tres ramas, una de ellas es la construcción, el sector que más sufrió la crisis y que ya lleva un tiempo creando empleo, pero todavía está muy lejos de los niveles alcanzadas hace ya más de una década. En concreto, los costes laborales por hora trabajada bajaron un 0,7% en el ladrillo. La misma caída se recoge en las industrias extractivas, un sector que da empleo a un colectivo muy escaso.

Fuente: El País