La contención mostrada por Donald Trump en su intervención ante el plenario del Centro de Congresos de Davos, fue una especie de espejismo. Le sirvió para contrarrestar el inicio del juicio político en su contra en el Senado y a lanzar sus eslóganes de campaña con la vista puesta en las elecciones presidenciales de noviembre. Pasados los primeros titulares, el Trump de siempre vuelve a la carga.

Una vez alcanzada la primera fase del acuerdo con China, que es más bien una tregua en la guerra comercial que mantienen, llega la hora de negociar con el Reino Unido y la Unión Europea. Y ahí vuelve a hacer uso de su propio manual, como describía en El arte del acuerdo

Este miércoles, el presidente de Estados Unidos ha vuelto a amenazar a la Unión Europea con nuevos aranceles. «Ha sido muy, muy difícil negociar con Europa. Se han aprovechado de nuestro país durante muchos años. Y les he dicho que eso no puede seguir», ha asegurado. «Ayer [por el martes en relación con su encuentro con la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen] tuvimos una gran conversación. Pero le dije que si no obtenemos algo voy a tener que pasar a la acción y la acción serán mayores aranceles sobre sus coches y otros productos que importamos», ha apuntado.

«La Comisión Europea es más dura que China. No han querido negociar con otros presidentes, pero lo harán conmigo», ha asegurado Trump.

En la misma línea, se mostraba el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, que en un panel del Foro Económico advertía al Reino Unido de las consecuencias de imponer una tasa digital. Mnuchin avisó de que si el Gobierno de Boris Johnson impone tasas «arbitrarias» sobre las compañías tecnológicas estadounidenses, su Gobierno hará lo propio con la industria automovilística británica. 

«Los temas fiscales internacionales son muy complicados y lleva mucho tiempo resolverlos. Si la gente decide aplicar impuestos arbitrariamente sobre nuestras tecnológicas, valoraremos aplicar impuestos arbitrarios», dijo. Junto a Mnuchin, el ministro de Finanzas británico, Sajid Javid, aseguró que el Gobierno mantendrá sus planes de imponer una tasa sobre los servicios digitales en abril y que una vez que se alcance un acuerdo en el seno de la OCDE sobre la fiscalidad digital, ellos retirarán sus propias medidas.

Fuente: El País