Cuando confía en un proyecto de terceros es capaz de reunir a golpe de teléfono 150.000 euros para financiar su arranque. Al menos eso es lo que hizo Lavin Luis cuando se convirtió en mentor de DrivinApp, plataforma conocida como “el Booking de las autoescuelas” por conectar a estos centros con alumnos que reservan sus clases.

Muchos emprendedores que llaman a la puerta de Luis en busca de asesoramiento saben que fundó su primera startup con 14 años, en 2008. En aquel momento, cuando casi nadie hablaba de eSports, este canario creó PSLT, una web de torneos de videojuegos que en año y medio superó los 20.000 usuarios. “No tenía ni idea, pero a través de tutoriales y la ayuda de mi hermano y unos amigos monté una empresa que facturaba y tenía patrocinadores”, recuerda.

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Aparcó ese primer sueño porque sus padres le pidieron centrarse en sus estudios, aunque con 16 años fundó NetGaming, una tienda online de accesorios para videojuegos. Desde entonces, ha encadenado proyectos y premios. Uno de los más relevantes llegó en 2013, cuando fue nombrado por Adecco como una de las cinco mentes más brillantes de España: “No me considero un genio. Solo soy una persona que empezó muy joven, gracias a lo cual he vivido experiencias con las que puedo ayudar a otros, aunque cada día sigo aprendiendo de los demás”.

En esa formación continua reconoce un punto de inflexión: conocer en 2014 a Carlos Blanco, al que propuso trabajar “de gratis” en su aceleradora de startups. Entonces se mudó a Barcelona y empezó a aprender “mucho más rápido” del ecosistema del emprendimiento. Ahora, Boardfy, la actual compañía de Luis, es la segunda startup en la que más ha invertido Blanco en toda su carrera como business angel, lo que da una pista del potencial de esta plataforma que monitoriza en tiempo real los precios de la competencia para configurar automáticamente ofertas más competitivas.

Una montaña rusa

Sus padres son de la India, pero nació en Las Palmas de Gran Canaria en 1993. Boardfy optimiza las ventas online de cualquier comercio y avisa a las marcas sobre sitios que ofrecen sus productos por debajo del precio recomendado. Ya está presente en nueve países y Luis quiere convertir a Estados Unidos en su mercado principal.

Para Lavin Luis, hay dos cualidades imprescindibles en un emprendedor: “Sobre todo, debe tener inteligencia emocional porque es una vida de altibajos en lo profesional y personal. Además, tiene que saber vender con pasión su proyecto a inversores, socios y clientes”.

Fuente: El País