La Comisión Europea ha aprobado este miércoles con condiciones la compra de la agroquímica estadounidense Monsanto por parte del grupo químico y farmacéutico alemán Bayer, una operación de 66.000 millones de dólares —unos 53.700 millones de euros— que dará lugar a un gigante mundial de la fabricación de semillas y fertilizantes. Para conseguir la aprobación, Bayer se ha comprometido a vender varias de sus divisiones: todo su negocio de semillas y parte del de fitosanitarios a su competidora alemana Basf, una operación anunciada en octubre pasado precisamente para conseguir el visto bueno comunitario y que llevará a Basf a pagar 5.900 millones de euros.

MÁS INFORMACIÓN

Bayer anunció el pasado octubre que había llegado a un acuerdo para la venta de parte de su negocio agroquímico (de semillas y herbicidas) a Basf por 5.900 millones de euros para poder comprar la estadounidense Monsanto, después de que el pasado mes de agosto la Comisión Europea comenzara una investigación para determinar si la megafusión incumple las normas del mercado europeo sobre concentraciones. Las empresas esperaban poder ejecutar las dos adquisiciones para principios de 2018.

La Comisión Europea ha estudiado si la transacción de Monsanto reduciría la competencia en mercados como el de los pesticidas o las semillas. Llegó a abrir una investigación para evaluar el impacto de la megaoperación. Las dimensiones de esta son enormes, ya que se trata de la mayor compra de la historia por parte de una empresa alemana.

Por su parte, el acuerdo entre Bayer y Basf implica la transferencia de activos que en el ejercicio 2016 generaron una facturación neta de 1.300 millones de euros. A esto se añaden más de 1.800 trabajadores, principalmente de EE UU, Alemania, Brasil, Canadá y Bélgica. Como parte del trato, Basf se ha comprometido a mantener a los trabajadores permanentes durante al menos tres años. «Con esta adquisición estamos aprovechando la oportunidad de adquirir unos activos muy atractivos en cultivos y mercados clave», explicó en octubre Kurt Bock, presidente del consejo de Basf.

Bayer registró en 2016 unas ventas de 46.769 millones de euros, lo que supone un incremento del 1,5% respecto al año anterior. El beneficio neto ascendió a 4.531 millones, un 10,2% más que en 2015, el mismo porcentaje que creció el beneficio bruto de explotación (Ebitda), hasta los 11.302 millones.

Fuente: El País