La fiebre de los Oscar ha llegado hasta los algoritmos. La edición número 90 de los premios más prestigiosos del cine partía con una clara favorita, La forma del agua, dirigida por Guillermo del Toro, que optaba a 13 estatuillas. Cualquier ser humano podría entonces imaginar que era muy probable que ésta fuera la ganadora de la noche. El trascurso de la gala lo confirmó y la película se llevó cuatro galardones, entre ellos el de mejor película y mejor director. Pero un sistema de inteligencia artificial ya se había atrevido a hacer su predicción para las categorías más importantes del certamen el día anterior. Y acertó en todo.

El conjunto de algoritmos entrenado por la empresa BigML aseguró que se cumplirían las expectativas de todos y el Oscar a la mejor película iría a parar a La forma del agua. Y también acertó con los nominados a mejor director, mejor actriz/actor protagonista y mejor actriz/actor de reparto. Pero, ¿es solo cuestión de nominaciones? No siempre. Esta inteligencia artificial, basada en procesos de aprendizaje profundo, no tuvo en cuenta ni la taquilla, ni la opinión de la Academia, la crítica o el público a la hora hacer sus apuestas. Sus predicciones se basaron en la información que obtuvo al analizar los parámetros de las películas, las actrices y actores que han ganado el Oscar en años anteriores.

Esto tiene sentido porque los modelos de inteligencia artificial mejoran con más información, es decir, que conforme vayan pasando los años y los modelos puedan analizar más ganadores de los Oscar sus predicciones serán cada vez mejores. Por el momento, los algoritmos que hicieron su apuesta para este año analizaron 1.183 películas de las ediciones que tuvieron lugar entre los años 2000 y 2017, donde cada una tiene más de 100 características, como la duración, el presupuesto y el género, las puntuaciones de IMDB y la cantidad de premios y nominaciones que han ganado las películas nominadas este año en otros premios clave de la industria como los Globos de Oro y los BAFTA.

Analizando toda esta información, el algoritmo dio una puntuación a cada nominado (no un porcentaje) y apostó sin dudar por Guillermo del Toro como mejor director por La forma del agua y Frances McDormand como mejor actriz protagonista por su papel en Tres anuncios en las afueras. El modelo predictivo no lo tenía tan claro para elegir al mejor actor. Según su apuesta, ganaría Gary Oldman con 88 puntos por su papel en El instante más oscuro, pero le seguía muy de cerca Timothée Chalamet, con 72 puntos según la maquinita, por su papel en la aclamada Call me by your name. La inteligencia artificial también acertó con Sam Rockwell, que subió a recoger el Oscar al mejor actor de reparto por su papel en Tres anuncios en las afueras y Allison Janney, que lo ganó por su papel en Yo, Tonya.

Fuente: El País