El grupo ACS ha aguantado bien en el primer trimestre ante el efecto adverso para su cuenta de resultados de la fortaleza del euro frente a las principales divisas en que obtiene ingresos. Al cierre del periodo declara 250 millones de beneficio neto, un 7,4% más que en el primer trimestre de 2017. A tipos de cambio constantes el beneficio sería un 13% superior al cosechado hace un año.

La compañía que preside Florentino Pérez ha ingresado 8.671 millones, un 3,7% por encima de la cifra de negocio del periodo comparable. Y su ebitda sube de los 605 millones a una nueva posición de 627 millones de euros, con un alza del 3,6%, en sintonía con el comportamiento de las ventas. El margen, de este modo, se mantiene en el 7,2%.

Pese a tener la cartera de contratos repartida por todo el mundo, la cifra final de 66.677 millones apenas cae un 2,1% lastrada por el citado efecto de la apreciación del euro frente a monedas como el dólar estadounidense o la libra. En términos comparables, la reserva de contratos superaría los 75.000 millones de euros, un 10% por encima de la posición de marzo del año pasado.

América del Norte se mantiene como el principal granero de actividad, con el 44% de los ingresos y un 39% de la cartera. La segunda área de influencia es Asia-Pacífico, con un 26% de la facturación y el 34% de la cartera. España, por su parte, supone el 14% de la cifra de negocio total y un 11% del volumen de contratación por ejecutar.

Un trimestre más todas las divisiones del grupo presentan beneficios, si bien estos han bajado en el negocio de Servicios, que ACS presta principalmente a través de la filial española Clece.

Servicios Industriales suma 103 millones al resultado neto, con una mejora del 13,2%; Construcción es el segundo negocio por volumen de aportación, con 103 millones y un ascenso del 13,2%, y el citado negocio de Servicios cae de los 12 millones del año pasado a ocho millones. En este último caso, ACS se apuntó plusvalías por la venta de Sintax en el primer cuarto de 2017.

En el balance vuelve a destacar el notable recorte de deuda neta, de 1.336 millones en 12 meses. La posición actual es de 359 millones ó 0,1 veces el ebitda. Un volumen por el que ACS se ha ganado la nota crediticia de triple B o investment grade. Desde el punto de vista de la dirección, el actual nivel de deuda ofrece capacidad de maniobra para acudir a los grandes concursos de infraestrcuturas con mayor aportación de capital y sin poner en riesgo la nota de alta solvencia. ACS destacó ayer la generación de caja y el control del circulante como claves para el ajuste de deuda.

Las invesiones de la compañía hasta el cierre de marzo han sido de 183 millones, de los que 103 millones se han destinado principalmente a maquinaria para el área de Construcción. Las desinversiones en el periodo han marcado los 21 millones.

Fuente: Cinco Días